Coldplay en Argentina: la última gran banda de estadios

Coldplay, la banda liderada por Chris Martin, demostró en las noches del jueves y el viernes que el rock también puede ser una fiesta. Por @JoaquinLCalvo

El Estadio Ciudad de la Plata fue, otra vez, el escenario de una pieza de nuestra historia cultural. Coldplay, la banda liderada por Chris Martin demostró en las noches del jueves y el viernes que el rock también puede ser una fiesta. De la mano de su arsenal tecnológico compuesto por pulseras inteligentes, videos y rayos láser el grupo inglés comenzó su gira mundial en Argentina.

Después de tocar en el entretiempo del Super Bowl (la final anual del campeonato de fútbol americano) lo que Chris Martin consideró “el mayor concierto en la historia de la banda” solo quedaba comenzar con la gira “A Head Full of Dreams” y La Plata fue el lugar. Pasadas las 21.20 del jueves las luces se apagaron, los adolescentes gritaron en tonos irracionalmente altos y la voz, tímida, del cantante retumbó en el estadio: “Estamos muy felices de estar acá, muy agradecidos. Esta noche es la primera de la gira mundial y elegimos Buenos Aires”. El hit Yellow llenó el silencio siguiente.

El último álbum de la banda “A Head Full of Dreams” consiguió el puesto 2 en Billboard, el ranking mundial dominado por los Justin Biebers y otros productos de la industria. Sus canciones en YouTube superan holgadamente las 100 millones de visitas (más de dos veces la población de Argentina) y La Plata es solo la muestra nacional de entradas agotadas en todos los recitales, en todo el mundo. Coldplay es la última banda de rock de estadios, no es el resultado del trabajo de un productor, no es el efecto de una campaña de marketing, ni la consecuencia de un show televisivo. Es la última banda popular de rock.

Los recitales de esta semana en el Estadio Único pueden ser una mirada al futuro de los espectáculos musicales:
– Las pulseras: Al ingresar, cada espectador recibió un símil-reloj en el cual la esfera prendía y apagaba luces que cambiaban de color dependiendo de la canción.
– El láser: Decenas de maquinas lanzaban rayos multicolores a los espectadores como si se trata de una fiesta rave.
– La interactividad: En épocas de redes sociales, la banda consultó a los fans por Instagram acerca de qué canción querrían escuchar, Green Eyes fue la elegida. Las nuevas redes no solo son terreno de expresión, también de publicidad y las bandas lo entienden.
– El anti-rockstar: Los integrantes de Coldplay ya no son los rockeros del reviente, las drogas pesadas y la pose de Pomelo, la sátira de Capusotto. El periodista Nicolás Salvarrey pintó de cuerpo entero a Chris Martin al contar que cenó pechuga grillada con agua y saludó amablemente a todos los presentes antes de salir al escenario. Nada más lejos de los Ozzy Osbourne y los Charly García que el rock ha vomitado.

Lara tiene 16 años y vino desde Capital Federal a ver una de sus bandas favoritas junto a su mamá: “Crecí escuchando Viva la Vida, después Paradise y ahora Adventure of Lifetime, Coldplay forma parte de la banda sonora de mi vida”. Lara mira con ojos brillosos las luces del campo, los láser y los miles de papelitos que vuelan cuando termina el crescendo de cada canción. Minutos antes de la medianoche Lara sale del Estadio, feliz, pero ya no es la misma, ahora tiene la cabeza llena de sueños.