Crucigrama: Novela Negra

CASI UN SIGLO DE MISTERIO – Por Norberto Tallón, especial para DiariodeCultura.com.ar.

Raymond Chandler definió en su ensayo de 1950 “El simple acto de matar” a la novela negra o Hard-boiled (carácter duro) como el género del mundo profesional del crimen. El nombre surge porque originalmente fue publicada en la revista “Black Mask” en Estados Unidos y la colección “Série Noire” de la editorial francesa Gallimard, pero al mismo tiempo por el carácter oscuro de los ambientes en que transcurre, lejos de las casas señoriales que ambientaban las novelas policiales típicas de la época.

El género parte del policial pero resolver el misterio no es la prioridad y el contenido es habitualmente muy violento. La división de personajes entre buenos y malos no está trazada por una línea clara e inamovible; la mayor parte de los protagonistas son individuos derrotados, en decadencia, buscando la verdad o, al menos, lo más cercano a ella. Generalmente presenta una asfixia, miedo, violencia, injusticia, inseguridad y corrupción del poder político en su atmósfera, reflejo del comienzo del Siglo XX estadounidense en época de depresión que lleva a la Ley Seca, el crimen organizado, la mafia y el hampa.

La aparición se inicia en revistas baratas o “pulp” (por el tipo de papel), sobre todo “Detective Book”, para un público trabajador o proletario, con un lenguaje directo, con eje en lo social, la ambientación y las descripciones urbanas marginales y los suburbios, a la vez los quizás más sugestivos de la corrupción política y moral. Los diálogos pasan, con frecuencia, por el Slang (lunfardo) callejero.

El desarrollo de la acción es rápido, movido y violento, no tan intelectual e inquisitivo como en otros estilos de narrativa policial. Otros son los ámbitos y tanto el detective como los criminales saltan a un lado y otro la soga del bien y el mal. Ese protagonista es, muchas veces, un fracasado y cínico salvándose al final por un básico sentido personal del honor. Los móviles del delito son, casi siempre, alguna debilidad humana como la rabia, el poder, la codicia, la lujuria, etc.

Puede considerarse como los padres del Género a partir de 1922, aproximadamente, a Carroll John Daly (Race Williams), Dashiell Hammett (Sam Spade y Nick Charles) y Raymond Chandler (Philip Marlowe) -entre paréntesis “sus detectives”-.

Gran cantidad de autores transitaron por el género, por lo que las citas son una mera orientación: Los de habla inglesa como Jim Thompson, Mickey Spillane, James M. Cain, James Hadley Chase, Ross Mc Donald, Patricia Highsmith y, más cerca en el tiempo, Michael Connelly, Ed McBain, Rex Stout, Ellery Queen, John Le Carré, Stephen King, Graham Greene y Craig Russell.

En Europa, los españoles Francisco González Ledesma, Manuel Vázquez Montalbán (Pepe Carvalho) y Rosa Ribas, los franceses George Simenon (y su Inspector Maigret), Boris Vian (con el seudónimo de Vernon Sullivan) y los italianos Andrea Camilleri (comisario Montalbano) y Leonardo Sciascia.

En América Latina: el cubano Rodolfo Pérez Valero, el chileno Roberto Ampuero, el mexicano nacido en España Paco Ignacio Taibo II y los peruanos Santiago Roncagliolo y Mario Vargas Llosa,

En nuestro país, el radicado en Barcelona Raúl Argemi, Mempo Giardinelli, Ricardo Piglia, Juan Sasturain, Rodolfo Walsh (con el comisario Giménez). Adolfo Bioy Casares y Jorge Luis Borges (bajo el seudónimo «Honorio Bustos Domecq» publicaron varias colecciones de relatos policiacos protagonizados por Isidro Parodi, un genio que desvela los más enrevesados enigmas desde una celda de la cárcel donde cumple condena).

Un tema aparte es Escandinavia que desde un precursor como el sueco Henning Mankell y desde allí pasando, entre otras y otros, Ása Larson, Maj Sjöwall se arriba al comienzo de los 2000 a Stieg Larsson, autor de la trilogía “Millenium”, y el presente de Jo Nesbo; es la zona del mundo donde en este tiempo la Novela Negra se ha transformado en un género editorial absolutamente popular, presente y un éxito de librerías en todo el mundo.

Un par de acotaciones. Stieg Larson (Millenium) murió luego de la publicación de su trilogía. Al principio hablamos de “pulp” como designación de las revistas y sin duda “Pulp-Fiction”, además de un nombre genérico de aquellas ediciones, es el homenaje de Quentin Tarantino a esta historia que hoy contamos.

Finalmente, las más importantes asociaciones vinculadas son el inglés Detection Club y la Mystery Writers of America. El Premio Edgar en todas sus modalidades, se considera el más importante galardón en los Estados Unidos. La Asociación Internacional de Escritores Policíacos otorga el Premio Internacional de Novela Dashiell Hammett durante la Semana Negra de Gijón, anualmente en Asturias, a la mejor novela policial escrita en español.

Norberto Tallón
@betotallon