Feng Shui: Orientaciones para estudiar

Por Patricia Traversa, especial para Diario de Cultura.

¿Cuántas veces nos encontramos a nosotros mismos, a nuestros hijos o hermanos trabados con una materia, desorientados con la facultad o desconcentrados en el colegio? Desde el Feng Shui, se pueden brindar ciertas pautas que favorecerán el correcto fluir de la energía y la volcarán al estudio.

Una condición elemental para activar el estudio con Feng Shui es la orientación de la cama, ver cómo dormimos. Por supuesto, también es fundamental la orientación que posee la persona cuando está estudiando según el número kua que se saca con la fecha de nacimiento.

Se suman los dos últimos dígitos del año y se descomponen en un solo dígito. En el caso de las mujeres se suma 5, si es hombre se resta 10 a la suma obtenida. Si la resta da 5 los hombres se convertirán en 2 y las mujeres en 8. Después del año 2000 los números prefijos cambiarán a las mujeres 6 y los hombres 9 menos el resultado que dio. Esto garantizara que la orientación sea la correcta a la hora de ponerse a estudiar.

Los números kua 1-2-3-4- deberán estudiar mirando al norte, noreste, este y sur. Y los números kua 6-7-8-9 deberán estudiar mirando al sudeste, sudoeste, oeste y noroeste.

Lo ideal, además, será estar de costado a una ventana y tener control de la puerta. No necesariamente deberá estudiar en su habitación, puede ser también en el comedor pero siempre en estas orientaciones.

Hay un área específica para activar el estudio con Feng Shui y es el sudeste del living. Pertenece al conocimiento y a la forma en que uno encara el estudio. Su elemento es la tierra.

En la habitación de los niños o adolescentes que tienen problemas con la concentración, lo ideal es colocar colores tierra como beige, amarillos, duraznos. En las habitaciones de las niñas conviene colocar adornos en colores naranjas. Los colores asociados a la energía tierra son aquellos que aportan, a través de su frecuencia, solidez.
Los colores terrosos pueden ser más tranquilos, como los tonos de beige que, inmediatamente, al entrar a un espacio con este color nos sentimos contenidos y pueden ser más enérgicos, como el amarillo o naranja que despiertan una energía de acción, seguridad y alegría. Si están en exceso, como sucede en el caso del marrón oscuro, puede no propiciar la acción. Los amarillos en exceso no deberían usarse ya que los niños se estresan.

Desde los aromas también podemos garantizar el flujo de energía correspondiente al estudio. Identificaremos los aromas tierra debido a las sensaciones de respaldo que brindan. Éstos nos ayudarán a concretar ideas, metas y a ser prácticos y coherentes con las decisiones.

Los mejores aromas tierra son el limón, la mejorana, el tee tree, la naranja. Están indicados cuando se necesita seguridad para lograr objetivos. En el caso de los niños, ayudan en el estudio y despejan la energía emocional a la hora de concentrarse.

En el sudeste del living es necesario colocar objetos tierra. Los objetos que nos refieren a la tierra son todos aquellos que están hechos con ella: la cerámica, los objetos de barro cocido, los utensillos de losa, las piedras semipreciosas y rústicas.

Las piedras amatistas, por excelencia, contribuirán a focalizar la energía en el estudio. También, las imágenes de montañas o las de un llano y los cuadros abstractos en tonos terrosos cumplirán este fin.

En el caso del estudio de los hijos también se debe activar el área “hijos” que corresponde al oeste del living. Colocar allí fotos de ellos, piedras de cuarzo blanco.

En el caso de que los adolescentes o jóvenes de la casa estén estudiando una carrera se debería activar también el sur. La carrera profesional en esta área será activada por el elemento agua y el elemento metal. Lo ideal es colgar cuadros con imágenes que contengan agua. Podemos activar este sector también con portarretratos metálicos o elementos metálicos directamente como un equipo de audio o el televisor.