RAUL LUZZI ENSAMBLE ORQUESTAL CON SILVIA REYES – “HOMENAJE A LATINOAMERICA”
Un largo retorno a América a través de su música, su lenguaje, sus colores, su geografía. Un homenaje a su gente, sus costumbres, sus vivencias. Trece temas inéditos, nacidos de la pasión artística sobre el amplio continente que nos alberga, desde la óptica de nuestra argentinidad.
«Decidimos retornar a América…. (De la que nunca habíamos partido). Retornar a la diversidad de su poesía y de su música. Transitarla por sus regiones, sus pueblos, sus coloridos paisajes, por la variedad de sus modismos lingüísticos, por la sonoridad de sus ambientes», destaca Luzzi.
«Queríamos reencontrarnos con nuestras propias raíces históricas, para renacer entre las calles de sus ciudades, entre sus habitantes, hermanos de nuestra propia sangre emancipada», subraya.
Y completa: «El camino que nos trazamos fue el de la espontaneidad y de la sinceridad, tanto en la elaboración de la temática, como en el desarrollo sonoro de este compacto. La gran orquestación musical de esta obra integral compuesta por Mario Dobry y Raúl Luzzi y el compromiso a priori de utilizar solo intérpretes en cada instrumento ejecutado, ha enriquecido esta creación tanto en el plano estético , como en la valoración humana de los artistas».
INVOCACION transmite la emoción y el amor que ha sido puesto en su realización.
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JORGE ANDERS JAZZ ORCHESTRA – «GOING HOME»
Jorge Anders-reconocido por la Fundación Konex en 2015- es parte de la historia de las grandes bandas locales de los años ’50 y ’60; debutó precozmente en la escena del jazz de Buenos Aires tocando el clarinete y el saxo tenor;se integró a las filas del Bop Club y tocó en el club Mogador y Jamaica, donde reemplazó en más de una oportunidad al “Gato” Leandro Barbieri con quien también compartió largas jam sessions.
En 1969 formó el mítico grupo Quinteplus, junto a Gustavo Bergalli, Santiago Giacobbe, Ricardo Lew, Jorge «Negro» González y Pocho Lapouble. En noviembre de ese mismo año fundó la Jorge Anders Jazz Orchestra, big band de intensa actividad, para la que dirigió, arregló y compuso hasta 1979 , momento en que Anders viajó a Nueva York,donde se afincó durante 30 años.
Al llegar, se instaló en el mainstream con su cuarteto.Tiempo después, tomó contacto con Mercer Ellington -hijo del gran Duke- quien ya estaba a cargo de la Duke Ellington Orchestra, con quien firmó un contrato por cinco años, en los que trabajó como su arreglador e intérprete, entre 1982 y 1987. Allí armó su propio proyecto de Big Band mientras que alternó con grandes solistas y grabó una veintena de discos editados entre Estados Unidos y la Argentina.
A su vuelta definitiva a Buenos Aires, tres décadas más tarde, convocó a los mejores músicos de jazz locales -entre quienes destaca su amigo, el recordado Hugo Pierre- y conformó en noviembre de 2011 la formación que subsiste hoy en día y se encuentra ininterrumpidamente en actividad.
Siempre guiada por el espíritu genial del gran Duke Ellington y con composiciones y arreglos del propio Anders, Jorge Anders Jazz Orchestra editó Going Home, disco recopilatorio de grabaciones de conciertos en diversos escenarios de Buenos Aires, realizados entre 2011 y 2014, que captura la habilidad, frescura e intensidad de esta magistral big band en vivo, bajo la dirección del talentoso y experimentado Maestro Anders.
Jorge Anders Jazz Orchestra se presentará el Jueves 28 de Abril y los Jueves 12 y 26 de Mayo en NOTORIOUS (Callao 966, CABA) a las 21.30hs.
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WOLFMOTHER – «VICTORIOUS»
El grupo australiano de hard rock Wolfmother regresó luego de dos años con un nuevo disco de estudio «Victorious» en el que busca recuperar los halagos obtenidos con su primer disco homónimo, luego de dos pasos en falsos intermedios.
En rigor, Wolfmother es el alter ego del cantante y guitarrista Andrew Sotckdale, único miembro que permanece desde su formación en 2004, en las playas de Sidney.
En el medio pasaron nueve miembros, de los cuales el único que hoy forma parte más o menos estable es Ian Peres en órgano, acudiendo a varios músicos para completar la formación tanto para el vivo como para el estudio.
Tras «Cosmic Egg» (2009) y «New Crown» (2014) la suerte de Stockdale parecía estar echada con dos discos que se repetían y no mostraban ninguna sorpresa.
Esas dos placas estaban tan lejos del debut discográfico de 2005, que los sucesivos cambios en la formación parecían golpes desesperados para revivir a un grupo destinado a la desaparición.
Sin embargo, con «Victorious», el enrulado músico de Brisbane se sacó la mufa de sus dos trabajos anteriores y se despachó con un disco pesado y claro a la vez, en el que las guitarras se ponderan, pero dejando lugar a baladas que rozan el pop.
Todo lo que habían insinuado en su comienzo está presente en esta placa y las influencias retro como Black Sabbath se amalgaman a la perfección con otros grupos más modernos, como Kyuss o Fumanchu.
Pero lejos de copiar a los ingleses o a los estadounidenses, Stockdale le da su impronta australiana al hard rock de Wolfmother con los cortes de guitarra en «The Simple Life» o la excelente canción que abre el larga duración, «The Love That You Give».
También hay piezas más ruteras como «Best of Bad Situation», con aplausos incluidos, y otras más radiales y abiertas, como «Pretty Peggy», con un estribillo de comercial de celulares o gaseosas.
«Victorious» son diez canciones que pasan volando durante sus 35 minutos y monedas, con una somera producción que se apoya en sonido moderno y estilizado en las guitarras de Stockdale.
El álbum fue producido por Brendan O’Brien, un histórico y exitoso ingeniero de sonido que participó en algunos discos de Pearl Jam, Rage Against The Machine y Stone Temple Pilots, a la vez que cimentó discos como «Black Ice», AC/DC y «Working on a Dream», de Bruce Springsteen, entre varios más.
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EL COLOR – «EL COLOR»
Primer disco de este grupo del sur del conurbano bonaerense que trabaja la canción y llega a diferentes desde lugares, caminos, vertientes como el pop, ciertos elementos jazzeros, colocados en elegancia y estilo.
El combo arranca con «Lo que sea» que tiene un inicio de canción casi desenchufada y con el paso de las líneas van surgiendo las guitarras, las bases y unos interesantes aportes de los sintetizadores simulando arreglos de cuerdas.
«Cazando luces» abre con la batería y un beat funky, seguida por una guitarra bien al frente y ese camino rítmico se cruza con trazos spinetteanos adornado por un interesante trabajo de voces.
El Color esta integrado por Lucas Cirilo en batería, percusión y voces, Sebastián Ferrea en bajo y percusión, Miguel García en voces, guitarra, piano y percusión, Facundo Lombardi en ronroco, guitarras, Luciano Rodríguez en teclados, programaciones y samplers y Pablo Ungaro en guitarras y voces.
«Canción para el fin del mundo» tiene rastros de rock progresivo, influencias de Jade y Seru Giran, pero también colores de un pop moderno, embellecido por un interesante solo de guitarra.
«Nudos» tiene una presencia más percusiva desde el bajo, la pulsión de una acústica y arreglos de teclados, que le dan una forma muy romántica y elegante. «Soltar» va al frente con una guitarra funky y un buen beat de la batería y recupera aires del pop argentino de los ’80.
En «Zambita», los integrantes de Color despliegan su gusto por los ritmos folclóricos, por las mixturas y la fusión, con un piano, una acústica y percusión bien folclórica, aunque la eléctrica pone elementos del country y el folk americano.
La canción «El color» incluye esa fusión entre folclore, pop y elementos electrónicos, modernos al estilo de Jorge Drexler en las primeras estrofas, para luego ganar potencia en el estribillo y hacia el final con interesantes arreglos de guitarra eléctrica.
«Bamboo» tiene un comienzo bien rítmico con la batería al frente, la eléctrica entrando y saliendo dándole interesantes aires pop. «Duerme ya» es una hermosa llullaby a piano y voz, a la que luego se suma toda la banda para darles épicos aires beatlescos.
«Cruz del sur» sustenta esa vertiente cancionera entre arreglos de y programaciones que conjugan lo noble acústico y orgánico con los sonidos más modernos, hasta que la guitarra y la batería quedan jugando debajo de la voz. El disco se cierra con «Mantra» con mucho aroma folclórico y con la voz a cargo de una invitada, Rocío Bernardiner, que le da mucho calor y sensualidad.
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FABIÁN ARAYA Y LOS REACTIVOS – «LUNÁTICO»
El saxofonista, flautista y compositor Fabián Araya presentará junto a su formación Los Reactivos su álbum «Lunático», en el que reúne siete composiciones que recostadas sobre el free jazz, abordan elementos del rock oscuro y psicodélico.
Si hay algo que permanece constante a lo largo de las canciones que integran este disco es la presencia del saxo que, comandado por el compositor y director de orquesta Araya, dibuja y desdibuja estados mentales desde la improvisación.
Algunas notas sobre el aire marcan tormentosamente el comienzo de «Reactivos parte I», así se inaugura «Lunático» con una canción que tiene su correlato en «Reactivo Parte II». En ambas composiciones conviven en contraste diferentes sensaciones y climas que van transitando los casi nueve minutos de canciones, si se los escucha como capítulos de una historia.
Oscuro y denso, más cercano al rock que al jazz se presenta «Anastasia», una composición que incluye un texto de Paulo Post en la voz casi furiosa de Bárbara Minio, quien lo transforma casi en una denuncia que encuentra su cadencia pero también su explosión sobre el colchón de instrumentos.
La batería comandada por Daniel San José da pie a «Congestión» que, tras una interrupción silenciosa, se permite el encuentro con el bajo y la guitarra, y deja que el saxo delinee en primer plano un sonido armonioso que por momentos enamora a la locura y también genera suspenso.
Difícil de catalogar el jazz de Araya, se fusiona y contextualiza desde lo musical al relato que -esta vez- Mario Fernández hace de otra poesía de Post en «Toda casualidad», embelesando la historia desde lo que no se dice pero complementa y deja imaginar la melodía.
Araya presentará las canciones de «Lunático» el domingo 8 de mayo a las 20.30, en Galpón B (Cochabamba 2536) junto a Los Reactivos: Mauro Rosal en saxo y trompeta, Jimena Roig en guitarra, Gabriel García en bajo y Daniel San José en batería, en el marco del ciclo Lunático, que fomenta artistas no convencionales.