Candela Giarda tenía 10 años, padecía una encefalopatía que la dejó al borde de la muerte y los médicos le dijeron a su madre que no pasaría la noche. Pero ocurrió un milagro, por el cual el Papa Francisco beatificará en septiembre al italiano, Albino Luciani.
Hoy adultos, los integrantes del elenco estable aseguran que nunca cobraron por cantar y que hoy no pueden subir libremente sus videos a las redes sociales; un escándalo que encierra un enfrentamiento legal