La medición permitirá establecer la evolución de los aprendizajes en el tiempo de la presencialidad plena, luego de los penosos resultados que arrojaron las pruebas realizadas tras la pandemia.
La evaluación se realizó para recabar «información relevante y diagnóstica» que permita tomar las decisiones necesarias en el sistema educativo con foco en el período «excepcional» de la pandemia de coronavirus, dijo el ministro de Educación, Jaime Perczyk.
Es una prueba que se realizó en 2019 antes del cierre de escuelas por la pandemia. Quince años atrás los alumnos argentinos superaban en todas las áreas a sus pares de la región; hoy están por debajo del promedio.