MIRÁ EL VIDEO. Cuatro años después de su lanzamiento, la sonda estadounidense consiguió tocar brevemente el asteroide Bennu para intentar recolectar unas decenas de gramos de polvo, una operación de alta precisión a 330 millones de kilómetros de la Tierra, cuyo éxito se conocerá en algunos días.
Descubren que dos conocidos asteroides, Bennu y Ryugu, podrían ser «hijos de un mismo padre»
Misión OSIRIS. Las cámaras lograron acercarse hasta 690 metros del astro Bennu. Es la distancia más cercana a la que ha orbitado una nave de un sistema solar.