De la A a la Z, los chicos imponen nuevas palabras o nuevas formas de hablar. La hiperconexión, exacerbada por la virtualidad del último año de pandemia, fue una incubadora de neologismos.
Si bien se sabe que se necesitarán profesiones hasta ahora desconocidas, no caben dudas que a futuro hay grandes temas que requerirán un amplio desarrollo de tareas.