Una semana para ver lo nuevo del cine italiano

Está en marcha la sexta Semana de Cine Italiano, con una excelente selección de films de grandes realizadores.

En 2014, el realizador sardo Paolo Zucca vino a Buenos Aires a presentar su filmEl árbitro y le confesó a la nacion que le gustaba cruzar bruscamente los géneros: lo romántico, lo grotesco, lo trágico. Ahora llega un nuevo film suyo, El hombre que compró la Luna, una coproducción ítalo-albanesa-argentina (participa Daniel Burman). Como la anterior, esta comedia transcurre en la Cerdeña natal del realizador y, también, propone un plot disparatado: unos agentes secretos reciben una llamada furiosa de los Estados Unidos; alguien, en Cerdeña, se ha convertido en propietario de la Luna, algo inaceptable para los norteamericanos, que fueron los primeros en plantar bandera allí. Esta comedia (casi) surrealista que, según la crítica, «combina poesía y farsa en dosis proporcionales», es la primera de las catorce películas que integran la nutrida sexta Semana de Cine Italiano. Organizada por el Istituto Luce Cinecittà, que se desarrollará entre el jueves próximo y el miércoles 12 de junio en el Village Recoleta.

Reaparecen cineastas más veteranos, como Daniele Luchetti, quien, con quince títulos en su haber, regresa con Io sono Tempesta, también en clave de comedia farsesca, que se verá en la Semana. Luchetti, considerado «el hermano menor» de Nanni Moretti ( Il portaborse, film consagratorio de Luchetti, tuvo a Moretti como actor protagonista), ahora despliega la peripecia del empresario Numa Tempesta, en otra muestra de su talento.

Otro de los autores que depara esta sexta Semana de cine peninsular es Francesco Miccichè, responsable de Ricos de fantasía, animada por dos grandes: Sergio Castellito y Sabrina Ferilli («la musa di Roma», que desplegó su rutilante desnudez en La grande bellezza). Ambos conforman un matrimonio que ve sacudida su rutina con la noticia de que Sergio se ha vuelto rico al acertar todos los números del Superenalotto (la millonaria lotería italiana), aunque el festejo durará poco.

La única presencia femenina de esta muestra se las trae: Letizia Lamartire. Seremos jóvenes y bellísimos es su primer largometraje, y plantea la relación incestuosa entre una madre cantante pop y su hijo varón, que la acompaña en guitarra.

Una apuesta descarnada es la de El vicio de la esperanza, que transcurre en Castel Volturno, un pueblo al norte de Nápoles, semidestruido y con un balneario fantasma; allí vive Maria, quien ha sufrido un abuso sexual y soporta a una madre alienada y a una jefa toxicómana. A exponer las responsabilidades mafiosas de ese deterioro se atrevió el napolitano Edoardo De Angelis.

Los productos actuales que vienen de la península siguen atrayendo al cinéfilo local, aun con films de trazos sutiles. Como, por ejemplo, el delicado realismo con que el realizador Valerio Mieli (que viene a Buenos Aires a presentar su film) narra una gran historia de amor en Ricordi: la relación de «Él» y «Ella» (los protagonistas innominados del film) depende del tiempo. Desde el primer encuentro hasta la crisis, la historia de amor de la pareja es expuesta a través de recuerdos, a veces deformados por la memoria.

En los tramos fuertes de esta 6» muestra despuntan algunos pesos pesados. Como Nanni Moretti, que comparece con un largometraje exhibido el mes pasado en el Bafici:Santiago, Italia. En las transmisiones de la RAI que llegan a la Argentina se lo vio al realizador recibiendo por este film el premio David Di Donatello, en medio de una ovación. En clave documental, reconstruye el rol que jugó la embajada italiana en Santiago de Chile en los meses posteriores al golpe de Estado de Pinochet, cuando sirvió de refugio a opositores.

Del celebrado Paolo Virzì, un especialista de la «commedia seria», se verá Notti magiche, varias noches «mágicas» que trasuntan algo así como «el Amarcord» del realizador, al evocar el Mundial de fútbol de Italia1990: la noche en la que la Nazionale italiana es eliminada por penales por la selección argentina, un importante productor de cine es hallado muerto en las aguas del Tíber. Los sospechosos del homicidio son tres jóvenes aspirantes a guionistas, interpretados por Irene Vetere, Mauro Lamantia y Giovanni Toscano. Los tres estarán presentes en la exhibición del film.

Otro que vendrá es Emanuele Scaringi, autor de La profecía de Armadillo, adaptación de una exitosa novela gráfica de Zerocalcare. También estará presente Matteo Olivetti, protagonista de La tierra de la suficiencia, debut en la dirección de una dupla de romanos: los hermanos (gemelos) Damiano y Fabio D’Innocenzo.

Uno de los films más celebrados -y no solo en Italia- de la temporada 2018 fue Dogman, de Matteo Garrone: un peluquero de perros, Pietro, que atiende en una zona marginal de Roma, se enfrenta con un amigo, Giancarlo, exboxeador con antecedentes criminales, un hecho real acaecido en 1988. En esta visión del submundo romano, que la crítica juzgó afín a la de Pasolini, el casi desconocido Marcello Fonte ganó el premio al mejor actor en Cannes, mientras que el film se alzó con nueve trofeos del David Di Donatello. Dogman es uno de los films más convocantes de esta sexta Semana del Cine Italiano.

Fuente: Néstor Tirri, La Nación