Así como la vida de todos los días se transformó de una manera inédita, las noches de sueño también. El bombardeo de noticias negativas repercute en el contenido onírico.
Los niños son chiquitos durante unos pocos años, después por un tiempo son latentes (durante la escolaridad primaria) y pasada la pubertad se convierten en adolescentes. Cada etapa es disfrutable en sí y tiene cosas interesantes tanto para el niño como para sus padres.