Una obra en bronce de Pablo Picasso y una réplica de una escultura de Edgar Degas batieron récords en una subasta de Christie’s de Nueva York, donde la escultura del español alcanzó el precio más caro de una subasta para una obra en bronce.
La policía griega fue foco de burlas y cuestionamientos en redes y medios de comunicación por el desafortunado gag que protagonizó.