Funcionarios en Beijing informaron que el artefacto espacial de 18 toneladas volvió al planeta. El descenso del segmento coincidió con las predicciones de expertos de que cualquier residuo habría salpicado al océano, dado que el 70 por ciento del planeta está cubierto por agua.
Es el “lado b” de la exploración espacial. Hay unos 29 mil objetos del tamaño de una pelota. Y otros más grandes. El peligro inminente es la sonda soviética Cosmos 482, cuya trayectoria final aún no está clara.