La japonesa Megumi Igarashi, conocida como Rokudenashiko, quien cobró popularidad en 2014 cuando fue detenida, acusada de distribuir «material obsceno» entre sus seguidores, en referencia a unos escaneos 3D de su vagina, sufrió un revés judicial en la corte de su país. Es escultora y pide terminar con el tabú.