Cuenta con la dirección musical de Marcelo Ayub, al frente de la Orquesta Estable y la dirección de escena, escenografía, vestuario e iluminación a cargo de Hugo de Ana. En un año atípico, es la primera ópera que se pone en escena en esta breve temporada que termina.
Se ve en el Colón. Su autor recuerda la puesta en París y al genial dibujante: “Sábat odiaba la ópera, eso nos dio una visión muy caricaturesca”.