En La Plata resiste pulpero. La peste no torció la voluntad de hombres y mujeres rudos que sostienen la tradición de las pulperías en el interior de la provincia de Buenos Aires. Son hijos, hijas, nietos y bisnietos de pulperos que sobreviven tras la clásica reja, dispuestos a servir una copa y ser refugio a la soledad en la inmensidad del campo.