El espacio de Barcelona reúne alrededor de 200 piezas que van desde el siglo XVIII hasta la actualidad, que fueron censuradas, prohibidas o denunciadas por motivos políticos, sociales y religiosos
«Franco no fue tan malo como dicen», se titula la pieza creada por Riiko Sakkinen (foto), artista finlandés residente en España. La galería Forsblom pide por ella 15.000 euros