El ranking que engloba las diez obras de arte más caras de la historia sufrió modificaciones e incorporó los nombres de dos pintores franceses Pierre Seurat y Paul Cézanne, luego de que se realizara «la subasta del siglo», de obras pertenecientes a Paul Allen, uno de los cofundadores de Microsoft, por la que se recaudaron más de 1.600 millones de dólares.