Se realizaron en el Campo Argentino de Polo los dos conciertos con los que Zeta Bosio, Charly Alberti y un grupo de ilustres cantantes, homenajearon a Gustavo Cerati y a la banda que fue uno de los emblemas del rock argentino.
Es el quinto disco de estudio, que lejos de inaugurar una instancia nostálgica a nivel musical, actuó como una suerte de envión para la etapa «sónica» que llegaría con su posterior producción.