Crear personajes en la literatura no es simple y que estos se expandan más allá del libro y se transformen en “clásicos”, muchos menos.
Sam Spade es un detective ficticio, inflexible, irónico y duro. Apareció en “Demasiados han vivido”, “Solo pueden colgarte una vez”, “Un tal Samuel Spade” y “El halcón maltés”, entre otras narraciones. La última de las mencionadas se convirtió, en 1941, con la dirección del gran John Huston, en una película con el mismo título. Spade fue Humphrey Bogart, y su nombre se enlazó con el del investigador.
Nick y Nora Charles fueron creados para la novela “El hombre delgado” y después estuvieron en una serie de filmes, el primero fue “La cena de los acusados”. La historia de Nick indica que Charles no es apellido original, sino que su padre (detective retirado) al ingresar a Estados Unidos desde Grecia, lo cambió por el Charalambides de su documento. Nora procede de una familia de la alta sociedad, su padre era propietario de una línea de ferrocarril, un aserradero y otros negocios. A Nick le gusta emborracharse, solo indaga en intrigas que lo “atrapen” y para cumplir el deseo de su mujer de verlo en esa actividad.
El Agente de la Continental es el protagonista de “Cosecha Roja (Red Harvest)”, también con paso en el cine, un tipo que, aunque tiene un extraordinario don de la observación, resuelve los casos caminando las calles, buscando información y manipulando las cosas a su antojo.
El Agente Secreto X–9 (Secret Agent X-9) es un héroe de historietas que tuvo los dibujos de Alex Raymond.
El “hacedor” de estos “seres imaginarios”, como otros tantos de menor nombradía, se llamó Dashiell Hammett, novelista, escritor de novelas, relatos y cuentos cortos y guionista cinematográfico. Nacido, en Maryland, Samuel Dashiell Hammett (Dashiell es el apellido de su madre y Hammett el de su padre). Militante comunista, sufrió la persecución de McCarthy. Murió en Nueva York a los 66 años, víctima de cáncer de pulmón. Combatió en las dos grandes guerras y, por ello, se encuentra sepultado en el Cementerio Nacional de Arlington.
Sus obras fundaron un nuevo subgénero literario: la Novela Negra. Su ejemplo no solo se transmitió en Estados Unidos sino que superó fronteras y llegó con fuera a Europa, sobre todo, a Inglaterra y Francia, en uno y otro lugar, a través de Ernest Hemingway, Raymond Chandler y Georges Simenon. No sabía que a fines de los 90 y en el tercer milenio, Escandinavia recrearía al primer nivel esa veta de la escritura, en la que el misterio, lo social y la violencia se mezclaban indefinidamente. Al respecto, vale decir que en “Cosecha Roja” se describen 26 muertes violentas, aunque el número de fallecidos es superior.
Otro de los grandes ya mencionado, Raymond Chandler, definió a Hammett y lo que había gestado: “Fue el escritor que extrajo al crimen del jarrón veneciano y lo arrojó al medio del callejón. El que describió a los delincuentes como eran y los hizo hablar como hablaban en la vida cotidiana”.
Norberto Tallón
@betotallon