Un argentino en Brasil

El primer dinero que circuló en Brasil fue la moneda mercadería, ya que durante mucho tiempo, el comercio fue hecho mediante el cambio de productos y vale destacar la importancia de lo que se considera la primera moneda, el azúcar, que en 1614 pasó a valer como dinero por orden del gobernador ¨Constantino Menlau¨. También, por la necesidad, tuvieron mucho valor el tabaco, las maderas y el algodón ya que en Europa estos cobraron real valor en el intercambio.

La primera moneda metálica -de Oro y plata- llegó con el comienzo de la colonización portuguesa; era el ¨Real Portugués¨, usado durante el periodo Colonial.

De todas maneras, todo se contaba en ¨Reis¨ -plural de Real-, si bien el dinero venía del país luso, era originario de España, que era mucho más rica en metales debido a la mayor abundancia de plata y oro en su imperio.

También tenemos que destacar que durante el dominio español a Portugal, entre 1580 y 1640, la moneda que circulaba en la colonia de Brasil era el ¨Real-Hispano¨, acuñado en Bolivia.

En 1624, Holanda invadió el nordeste brasileño por primera vez y, sobre su dominio, fue realizado el primer trabajo de estampado de monedas en el territorio nacional; eran cuadradas, pequeñas y en oro y plata y surgieron en 1645 en Pernambuco.

Las casas fabricantes fueron creadas en la misma medida en que crecían en importancia sus metrópolis. La primera fue la ¨Casa de la Moneda de la Bahía¨, seguida por las de Rio de Janeiro, Pernambuco y Minas Gerais.

Cuando la corte portuguesa llegó a Rio de Janeiro debido a la peligrosidad de las ¨Guerras Napoleónicas¨, el crecimiento de los gastos por causa de la falta de los metales preciosos, le dió paso a la impresión de la moneda papel para atender el comercio. Entonces, se creó el ¨Banco do Brasil¨, en 1810, año que se lanzaron los primeros billetes de banco en el país.

Cuando Don Joao VI regresó a Portugal, no solo llevó consigo su corte, sino también casi todo el tesoro nacional del ¨Brasil Colonia¨ y dejóo las reservas bancarias de la Colonia en bancarrota. En ese momento, comenzó a emitirse papel-moneda, sin rastros de dinero metálico suficiente, lo que ocasionó la progresiva desvalorización del capital.

Esta actuación se convirtió en un efecto bumerang, debido a que cuando Don Pedro I se tornó emperador de Brasil, en 1822, al heredar la corona, se encontró con los cofres vacíos y una crisis económica basada en la deuda pública.

Ya en el gobierno de Don Pedro II, la situación mejoró, principalmente debido a la producción cafetera que era el centro de la economía del país y esto perduraría durante los 100 años subsiguientes, con el apoyo a ese crecimiento por la construcción de rutas y ferrovías.

En 1888, con la abolición de la esclavitud, se completó parte del acomodamiento de lo que era la problemática del mercado de trabajo, ya que pudo disponerse de mano de obra necesaria para la industrialización que permitió la evolución para el desenvolvimiento del capital en el Brasil.

La desvalorización se transformó en un mal crónico y las crisis financieras fueron sucediéndose, pasando a ser el gobierno federal el único responsable por la emisión y solo en 1911 el dinero brasileño registro su primera alta en el mercado internacional.

En 1906, fue creada la ¨Caixa de Conversao¨, para lidiar con la crisis en el mercado cafetero y mantener el equilibrio como poder del canje de moneda en el comercio con otras naciones. Para esto, la ¨Caixa¨ emitió cedulas en valores que eran garantizadas en oro y que podían ser cambiados por monedas de ese metal. Esta ¨Caixa¨, cerró sus puertas en 1920.

La Primera Guerra Mundial entre 1914 y 1918, desvalorizó la divisa brasileña y, años después, dió un quiebre en la bolsa, en 1929, que influyó en la economía mundial. Además, comenzó la crisis en la producción cafetera del país.

Para intentar estabilizar la situación, se creó la ¨Caixa de Estabilizacao¨, que emitía dinero papel para poder ser cambiado por barras de oro, con la intención de formar una reserva que tornase más fuerte el dinero nacional. Este intento también fracasó y 10 años después de su apertura tuvo que cerrar sus puertas.

En nuestra próxima entrega culminaremos con la historia de la moneda en Brasil.

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