Un argentino en Brasil: Praia da Guarda de Embaú

ALDEA DE PESCADORES DONDE REINA LA TRANQUILIDAD- Por Alberto Curia, especial para DiariodeCultura.com.ar.

Es muy difícil a la hora de elegir el destino turístico para disfrutar en familia; en el momento de ponerse de acuerdo surgen muchos interrogantes, nuevos destinos o, simplemente, la posibilidad de visitar el mismo lugar de años anteriores.

Hoy desde Diario de Cultura, podemos recomendar un magnifico lugar poco conocido por los argentinos: “Praia da Guarda de Embaú”, localizada a 36 kilómetros del municipio de Palhoça (entrada a Florianópolis), pequeña villa de pescadores descubierta por surfistas en la década del 70, con grandes olas y exuberante naturaleza.

No posee una gran infraestructura turística y sustentan la economía del lugar el alquiler de casas particulares y la pesca. Ostenta algunos “barzinhos” o “botecos”, (bares chicos); que albergan a los visitantes y parroquianos del poblado.

Es considerada una de las 10 playas más lindas de Brasil y uno de los mejores escenarios mundiales para la práctica del surf. Situada en la reserva da “Serra do Tabuleiro”, de una belleza indescriptible para deleitarse a lo largo de sus costas.

Para llegar hasta allá, es preciso atravesar un rio a nado o en canoa, el “Rio da madre”, que arrastra sus aguas atravesando la villa para desembocar en el mar, luego de formar una pequeña playa entre las piedras.

Este paraíso ribereño está localizado en esa faja de arena entre el rio y el mar, con dunas de areniscas blancas que le dan marco a una verdadera postal marina.

“Guarda de Embaú”, oculta la bella playa “Da Barra” o “Prainha”, localizada en el sector norte adonde se puede llegar atravesando el camino que corta el “Morro da Grama”, bordeando el “Rio da Madre”.

Los más aventureros pueden subir hasta la “Piedra do Urubú” (Piedra del cuervo), roca que la separa de la “Praia da Pinheira”. Este acceso es por un camino abrupto de aproximadamente 20 minutos, que permite una vista impresionante de las playas de: “Gamboa”, “Garopaba” y “Prainha”. Esta última, localizada en una ensenada, a 35 Kilómetros del Municipio de Palhoça, es una de las más frecuentadas, de aguas limpias y tranquilas ideal para disfrutar con niños.

Esta pequeña aldea de pescadores tiene aproximadamente 5000 mil habitantes dedicados en su mayoría a la pesca artesanal y al comercio. Posee buena infraestrutura con farmacias, supermercados, posadas y restaurantes.

Tiene las características típicas de los pueblos de marineros, con decenas de embarcaciones en toda la extensión de la playa, donde es posible comprar peces frescos todos los días.

El poblado está dividido en dos: ”Praia de Baixo” y “Praia de Cima”, situadas en oposición una de la otra. Ambas son excelentes para tomar baños; la primera es la mayor, formada por una ensenada de 7 kilómetros con su refugio de pescadores y donde se realiza la mayoría de eventos. La otra está situada entre dos morros y una pequeña extensión de playa con una inconmensurable belleza natural.

También se pueden disfrutar las aguas de “Praia do Papagaio”, “Praia do Sonho”, “Pedras Altas”, totalmente naturista y que forma parte de la “Reserva Biológica da Serra do Tabuleiro, que alberga especies muy ricas de flora y frutas silvestres y tiene dos pequeñas playas de no más de 100 metros de extensión, divididas por la inmensa vegetación que ofrecen una tranquilidad pocas veces conseguida.

Además, en las inmediaciones, existen estrechas riberas como “Enseada do Brito” (fundada hace más de 250 años), “Praia do Cedro”, “Praia do Tomé” y “Praia do Fora”.

En «Praia da Guarda de Embaú” reina la tranquilidad. Puede ser su próxima alternativa vacacional. Está muy cerca de donde disfrutan gran parte de los argentinos que viajan a Brasil, en el estado de Santa Catarina, poco antes de llegar a Florianópolis…

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