A 129 años del disparo fatal que terminó con su vida, se rememoran sus días casi en la miseria y sin éxito, antítesis de lo que ocurrió luego de su muerte: en 1990 su obra «Retrato del doctor Gachet» fue comprado por 82,5 millones de dólares y se convirtió entonces en la pintura más cara del planeta. En la imagen de portada: Autorretrato de Vincent Van Gogh en el Musée d’Orsay, París.