Crucigrama: Plaza Lezica

… EL PARQUE RIVADAVIA – Por Norberto Tallón, especial para DiariodeCultura.com.ar.

Conrado “Chamico” Nalé Roxlo lo observaba día y noche desde la ventana de enfrente, sobre la avenida, la de su departamento en los altos de un “café notable”: “El Coleccionista”; una cuadra más allá pero del otro lado, la casona de Fermín Estrella Gutiérrez. Dos escritores, de otros tantos que vivieron y visitaron, que rodearon el parque.

Originalmente conocido como Plaza Lezica, por haber sido una parte de la Quinta Lezica, es un espacio público verde de seis hectáreas, casi, el centro geográfico de la ciudad de Buenos Aires. Avenida Rivadavia y las calles Doblas, Chaco, Rosario y Beauchef son sus límites; creado allí, en Caballito, el 10 de julio de 1928 por una ordenanza municipal, con diseño original de Carlos Lavecchea, dirigido por Carlos Thais.

Parque Rivadavia, desde hace mucho tiempo, con la amplísima arboleda que lo destaca, al igual que el gran ombú. Un muy pequeño lago artificial, el monumento a Simón Bolívar realizado por el escultor José Fioravanti, una antigua noria (única construcción original de la época de la quinta de Ambrosio Plácido de Lezica), juegos para los chicos, una pista de patinaje, “La Fuente de la Doncella o Fuente Catalana” del artista de ese origen José Llimona Brughera, la escultura de Luis Perlotti “Madre”, donada por el Club de Leones del barrio. Desde 2003 con enrejado perimetral y 9 entradas con puestos de seguridad.

Sobre la enfrentada vereda de la avenida la Parroquia de Nuestra Señora de Caacupé, en el límite que va hacia José María Moreno, el oeste, funciona desde aproximadamente comienzos de los 70, lo que surgió informal, una feria donde es posible encontrar música y libros (la mayoría usados). Bajo el ombú, los domingos, funciona desde hace siete décadas una feria de filatelia y numismática. Casi sobre Rosario, al costado de un tránsito rápido y repleto de colectivos, la antigua calesita.

También, en el centro del predio, hay una especie de anfiteatro. Desde 2011 hasta la actualidad, se realizan competencias de Freestyle con el nombre de “El Quinto Escalón” y acontecimientos importantes de la Hip Hop Underground en el país, sumando otras: “Halabalusa” o “Freestyle Las Vegas”.

Como se dijo, “Chamico”, con ventanal al parque, promovió un permiso para que, también, los domingos los libreros pudieran trabajar. Consiguió, en la presidencia de Arturo Frondizi, de un funcionario que vivía a metros, en el pasaje Florencio Balcarce, la autorización. Illia lo prohibió, pero en la tercera presidencia de Perón volvió la actividad. Más o menos reglada, en los distintos rubros, con el tiempo.

Alguna vez Roberto Arlt escribió una crónica de enamorados con el lugar como escenario…

Parque Rivadavia, un oasis en medio de edificios, con movimientos entre el arte, el recuerdo y la pausa del fin de semana… Una historia, un presente más de Buenos Aires.

Norberto Tallón
@betotallon