Crucigrama: Tengo un sueño

Martin Luther King Jr. – Por Norberto Tallón, especial para DiariodeCultura.com.ar.

En Atlanta -Georgia/EUA- con el nombre de Michael King Jr., nació el 15 de enero de 1929. Cambió, como su padre (también religioso), su nombre en memoria de Martin Lutero. Pastor y ministro Bautista, casado con Coretta Scott y padre de cinco hijos. Doctor en Filosofía por el Morehouse College y la Universidad de Boston, con estudios en Crozer Theological Seminary. Activista e impulsor del Movimiento por los Derechos Civiles y líder pacifista, partidario de la No Violencia. Premio Nobel de la Paz en 1964.

A fines de marzo del 68 viajó a Memphis (Tennessee) para apoyar a recolectores de residuos negros, en huelga para obtener mejora salarial y mejor trato. El 4 de abril, este domingo hace 53 años, a las 18.01 fue asesinado con un disparo, aparentemente desde un automóvil en tránsito, en el balcón del Lorraine Motel donde asistiría a una cena de amigos. Se declaró culpable a James Earl Ray, detenido en el aeropuerto de Londres-Heathrow, en el intento de huir del Reino Unido con pasaporte falso, y condenado a 99 años de cárcel (El paso del tiempo, testimonios y ciertas pruebas han madurado muchas dudas sobre la autoría, tanto material como intelectual). El crimen provocó una oleada de motines raciales en 60 ciudades del país que produjeron numerosas muertes. El presidente Lyndon B. Johnson decretó un Día de Luto Nacional (primero por un afroamericano). Tenía 39 años.

Desde niño, vivió en una sociedad segregacionista. Dos amigos blancos le anunciaron que les estaba prohibido jugar con él. Nombrado, con 25 años (1954), pastor de la Iglesia Bautista de la Avenida Dexter, en Montgomery -Alabama-. El sur estadounidense, en esa época, era señalado por la violencia ejercida contra los negros. El racismo ocasionaba muertes e injusticias. Creyéndolo comunista, durante un tiempo considerable, fue vigilado por el FBI.

Protagonista en incontables protestas, marchas y concentraciones adhiriendo a los principios de la desobediencia civil no violenta, tal como Gandhi en la India. Con el arresto de Rosa Parks, por no ceder su asiento a un blanco, en 1955, inicio un Boicot de Autobuses, cuyas consecuencias llegaron a la Corte Suprema de Estados Unidos y una decisión al respecto. Presintió que esas acciones contra la segregación sureña causarían gran cobertura mediática del conflicto por la igualdad y el derecho al voto de las personas de piel negra, exhibiendo privaciones y humillaciones cotidianas, violencia y acoso a militantes. En consecuencia, el conflicto se convirtió, en los ’70, en el tema político más importante de los americanos. Así surgieron leyes como la “Civil Rights Act” (1964) y “Voting Rights Act” (1965).

Albany en Georgia con la anulación de su legislación de segregación. Birmingham y el Boicot de Pascua que derivó en la cárcel y una “Carta desde la cárcel de Birmingham”, donde definió su lucha y recibió el apoyo directo del presidente John Fitzgerald Kennedy y su mujer, Jacqueline Kennedy. La Marcha sobre Washington por el Trabajo y la Libertad. La manifestación de Selma a Montgomery que tuvo un prólogo de agresión policial violenta en el cruce en un puente (Conocido como “El domingo sangriento (“Bloody Sunday”). Actos pacíficos en Chicago con apoyo y empatía por los pobres. El Acto de Nueva York, un año antes de su muerte, sobre la actitud del gobierno en Vietnam. En los últimos dos meses del 67, se reunió con su equipo para discutir la nueva legislación, los motines raciales (“Hot Summers”) y la aparición del Black Power. Decidieron organizar La Campaña de los Pobres, para pugnar por la justicia social, que calificaba la “segunda fase de los derechos civiles”, situando a la Biblia, por obvias razones de creencia, en el centro de su mensaje, para ir hacia “la tierra prometida de Justicia y de Fraternidad”.

Encabezó la Marcha sobre Washington, en agosto de 1963 y, en su culminación, pronunció el famoso discurso “I Have a Dream (Tengo un sueño)”, con el que extendió a la conciencia pública sus reclamos y oposiciones. Palabras que lo consolidaron como uno de los más grandes oradores.

Casi como instantáneas fotográficas la vida de Martin Luther King Jr., y esas cuatro palabras con vigencia y urgencia. Más allá de sus pasos y logros, sumados a los de sus discípulos y adeptos, el mundo continúa con iguales demostraciones, a veces tan o más crueles, tanto para merecer un hashtag en todos los niveles sociales y de actividad, hoy mismo, de: #EndRacism (Fin al Racismo) para que no sobreviva conciencia humana que no lo haga suyo.

A un clic de distancia, subtitulado en español y en alta definición, aquellas frases inolvidables… Cuídense mucho, pero mucho.

Norberto Tallón

@betotallon