A&E estrenó la nueva docu-serie Secretos de Playboy, que desnuda el lado más oscuro del imperio creado hace casi 70 años por el fallecido magnate Hugh Hefner.
El documental explora las verdades ocultas detrás del negocio Playboy a través de una lente moderna, a medida que se adentra en el mundo complejo que creó Hefner y examina sus consecuencias de gran alcance en la visión del poder y la sexualidad en nuestra cultura.
Secretos de Playboy, que consta de 12 episodios que se emitirán de a dos a partir de este domingo a las 22 hs, cuenta
con material inédito, incluyendo imágenes de archivo y entrevistas
exclusivas con personas que comparten sus historias por primera vez.
Entre estas se encuentran la ex directora de Playmate Promotions, Miki García; ex novias de Hefner como Holly Madison, Bridget Marquardt y Sondra Theodore; la residente de Playboy Mansion West, Jennifer Saginor; la Conejita Madre PJ Masten; las ex Playmates Rebekka Armstrong, Susie Krabacher, Dona Spier, Tylyn John y Cristy Thom; y miembros del personal y del círculo íntimo de Hefner.
Para la sociedad de la época previa a la liberación sexual de los 60, los desnudos eran de categoría clandestina en las publicaciones y mal vistos por entonces.
Hasta la aparición de Playboy en 1953 que rompió con ese paradigma y
puso al cuerpo desnudo de la mujer como objeto de consumo en medios.
En la serie se ve como este nuevo producto para hombres derivó en un oscuro mundo de depredación sexual -que involucró a famosos- como así también en el tráfico y abuso de mujeres (muchas de ellas menores de edad) que recalaron en mansiones satélites que funcionaban como clubes privados para realizar orgías.
También hay lugar para sucesos trágicos como la muerte por sobredosis de Adrienne Pollack, en 1973, el suicidio de Bobbie Arnstein (asistente de Hefner) en 1975 y el crimen de la playmate Dorothy Stratten, en 1980. Otro oscuro episodio que el documental no pasa por alto son las pig nights (noche de los cerdos, en relación a como Hefner llamaba a las prostitutas) de cada jueves, con fiestas de chicas reclutadas en Sunset Boulevard y llevadas a la mansión.
«Todo era como un culto», asegura Miki García, ex Conejita y quien trabajó para Playboy como jefa de promociones entre 1973-1982. «Las mujeres eran preparadas y se les hacía creer que eran parte de esta familia. Y él (Hefner) se creía el dueño de esas mujeres. Hubo Playmates que tuvieron sobredosis y hubo Playmates que se suicidaron», revela García. «Hefner incluso envió a alguien para sobornarme. Cuando encontrás a alguien tan poderoso te da tanto miedo porque todo puede pasar. Lo que sea», detalla García.
Fuente: El Cronista