Grandes películas que cumplen 15 años y que siempre hay que volver a ver

Un repaso por algunos de los mejores films estrenados en 2007 para dar cuenta de la versatilidad que atravesaba la industria hace no tanto tiempo

Hace 15 años, Hollywood atravesaba un momento muy distinto al actual. Las comedias dominaban buena parte de la taquilla, las franquicias de superhéroes apenas se asomaban, Pixar ya era un imbatible, y el cine independiente se colaba entre lo más visto del año. En muchos sentidos, 2007 representa buena parte de la versatilidad que la industria tenía en ese momento, y por ese motivo repasamos algunos de los títulos más emblemáticos de ese período.

Supercool

A priori, no parecía más que otra embajadora de ese gran subgénero centrado en qué le sucede a un grupo de amigos que terminan el colegio y se preparan para la llegada de la universidad. Desde los años setenta en adelante, las películas de estudiantes siempre dieron buenos frutos, y la evolución que supuso El club de los cinco le permitió a ese género demostrar su verdadero potencial.

Supercool ratificó que el de los jóvenes ante el abismo del crecimiento es un molde de enormes posibilidades. La película dirigida por Greg Mottola, y escrita por Seth Rogen y Evan Goldberg, explora el vínculo entre dos mejores amigos, que deberán separarse cuando asistan a universidades distintas. De esa forma, algo que comienza como un muestrario de chistes fáciles (pero irresistibles), pronto vira hacia un agridulce retrato de esa edad, un momento en el que las amistades se diluyen no por falta de amor, sino por fuerza de las circunstancias. Supercool deja a su paso un desfile de frases y personajes memorables (¡McLovin!), sin descuidar el amor hacia dos protagonistas que simbolizan el cálido mundo de la amistad adolescente.

Supercool está disponible en Netflix.

Expiación, deseo y pecado

Con apenas una película en su haber (la enorme Orgullo y prejuicio), Joe Wright se convirtió, a comienzos de siglo, en uno de los nombres más prometedores de la industria. Un realizador que tenía poco más de treinta años, había superado el complejo desafío de reconfigurar un clásico de Jane Austen, y para su segundo proyecto tomó por asalto una de las grandes novelas del siglo XXI, Expiación, de Ian McEwan. Sin escalas, Wright iba del ingenio y el desparpajo liberador de Austen al drama de un amor interrumpido, atravesada por la barbarie de la guerra. Nuevamente con Keira Knightley al frente, Wright llevó adelante una tragedia familiar y, como hizo en Orgullo y prejuicio, se apropió de un mundo ajeno, dando lugar a nuevos pasajes y haciendo a un lado aquello que sí funciona en la literatura, pero no en el cine.

En Expiación, deseo y pecado, el realizador se muestra confiado en su visión, sin temor a modificar tótems sagrados y defendiendo el valor de una película que desobedece la obra en la que se basa. Wright comprende al cine no como un rehén de las novelas que adapta, sino como un trampolín creativo que juega con esa materia prima, para hacer algo distinto. Y en este film, el director logra planos perfectos, consagra su cámara a la fotogenia contundente de Knightley, y construye una de las historias de amor más arrolladoras que dio la pantalla grande.

Expiación, deseo y pecado se encuentra en Apple TV+.

La joven vida de Juno

Elliot Page Page, Michael Cera y Diablo Cody, nombres que no eran tan conocidos pero que gracias a La joven vida de Juno se instalaron en el radar de la cinefilia. La historia de una adolescente que queda embarazada y decide dar en adopción a su bebé, encontró en el guion de Cody una forma de esquivar los lugares comunes y edulcorados, para construir una historia genuina, de adultos imperfectos y jóvenes dueños de inesperadas certezas.

Este film se convirtió en una de las mayores sorpresas de 2007, un título que simbolizaba la llegada de una nueva generación que prometía tomar Hollywood y representar una sensibilidad millennial, capaz de ensamblar una historia en la que todo iba a contramano de lo esperado. Música de Kimya Dawson, teléfonos con formas de hamburguesa y cuarentones con ganas de abrazar una adolescencia perdida: La joven vida de Juno utiliza esos y otros ingredientes, para retratar a dos generaciones en crisis y demostrar que la juventud, a veces, necesita tomar el control de las cosas.

La joven vida de Juno está disponible en Amazon Prime Video y Paramount +.

Ratatouille

Finalizando la primera década del siglo XXI, Pixar era sinónimo de grandes películas. La lista de obras maestras, ya en ese momento, era notable. En ese contexto, la llegada del director Brad Bird a esa productora, de la mano de Los increíbles, le permitió a Hollywood replantearse el lugar de los superhéroes desde un lugar desangelado, pero envuelto en peleas que entusiasmaban a los más pequeños.

El segundo proyecto de Bird en Pixar, fue el relato de un pequeño ratón que sueña con convertirse en chef, una premisa que dio pie a una atípica aventura que supone una sincera reflexión sobre el mundo del arte, la crítica y el amor por las vocaciones propias.

Ratatouille se encuentra en Disney+.

Walk Hard: la historia de Dewey Cox

2007 fue un año excepcional para la comedia, en buena medida gracias al trabajo que Judd Apatow en ese rubro. El director de Ligeramente embarazada (otro gran título estrenado ese año), por esa época comenzó a producir enormes comedias que revitalizaron al género. Entre algunas de ellas, se destacaron Talladega Nights¿Cómo sobrevivir a mi novia?, y esta película, Walk Hard: la historia de Dewey Cox.

Una pieza que se presenta como una sátira de la biopic sobre Johnny Cash, es la excusa para un anárquico repaso por la historia del rock, protagonizado por Cox, un músico que atravesó desde los 60 y hasta los 2000, todas las tendencias musicales posibles. John C. Reilly compone a un artista iniciado en el country, pero con un amor por la experimentación que lo lleva a convertirse en una suerte de camaleón que pasa por el folk, el rock, el disco y hasta los covers de David Bowie. Walk Hard: la historia de Dewey Cox es una comedia perfecta, que continúa la tradición de un ícono como This is Spinal Tap, que juega ingeniosamente con los clichés de los biopics rockeros.

Walk Hard: la historia de Dewey Cox está disponible en Apple TV+.

A prueba de muerte

Robert Rodríguez y Quentin Tarantino tuvieron una idea muy sencilla, pero muy promisoria: rendirle culto al cine exploitation, a través de un doble programa en el que abunda la acción, la violencia, las persecuciones y los personajes de pocos matices (pero de enorme carisma). Ese experimento dio por resultado Planet Terror, dirigida por Rodríguez, y A prueba de muerte, a cargo de Tarantino.

En su película, el autor de Tiempos violentos pone en práctica un ensayo alrededor del cine fierrero y del poder que puede tener un auto como herramienta hacia la violencia cinematográfica. Kurt Russell interpreta a Suntman Mike, un conductor que acostumbra hostigar mujeres arriba de su Dodge Charger 1969, provocando la muerte de sus víctimas. Pero en su camino se cruzará con un grupo de amigas que pasarán de ser víctimas a victimarias, acorralando al protagonista en su propio juego. A prueba de muerte no es una pieza pequeña, tampoco es una excentricidad ni un capricho, sino un título que se integra armoniosamente a la obra de Tarantino, un cuerpo de películas en las que el realizador juega con la pureza de los géneros cinematográficos como vehículo para imprimir una firma autoral.

A prueba de muerte se encuentra disponible en Google Play Movies.

Los Simpson: la película

Puede que no sea superior a cualquiera de los episodios de sus mejores temporadas, pero es indudable que la llegada de los Simpson al cine fue uno de los mayores eventos de 2007. La familia amarilla de Springfield parecía confinada a la televisión, cuando Fox anunció el desembarco de Homero y compañía a las salas del mundo. La noticia se recibió con entusiasmo pero también con escepticismo: ¿Podrían Los Simpson tener una aventura lo suficientemente grande, que justifique exhibirla en una pantalla ídem?

La respuesta fue que la película si bien no es una obra maestra, al menos permite redescubrir a estos personajes, en el marco de una trama que se despega de sus aventuras habituales. Y la gracia de esta propuesta reside justamente en que Los Simpson quizá no necesitaba un desafío gigantesco para el cine y que, en parte, su identidad tiene que ver más con la sátira social que con las ambiciosas producciones. Los Simpson: la película cumple, porque presenta un generoso puñado de inolvidables gags, y una sentida carta de amor a la imperfección que habita en cualquier familia.

Los Simpson: la película está en Star+ y en Disney+.

De yapa: Hot Fuzz

Aunque en su momento no tuvo estreno oficial en la Argentina, ya se puede ver la segunda entrega de la trilogía Cornetto, integrada por este film, junto a Shaun of the Dead y The World´s EndHot Fuzz se presenta como una buddy movie de manual, que pronto toma caminos inesperados.

El film de Edgar Wright, protagonizado por Simon Pegg, Nick Frost y Timothy Dalton, es un título que creció con los años, y que espera a los espectadores que aún no lo descubrieron, para sumergirse en la obra de un director considerado de culto.

Hot Fuzz está disponible en Google Play Movies.

Fuente: Martín Fernández Cruz, La Nación