Las 10 comedias de culto que todo el mundo debería ver

MIRÁ LOS VIDEOS. En esta nota, una selección de películas que se encuentran en las diferentes plataformas de streaming y que incluye desde los Monty Python y los hermanos Coen a Tim Burton o los Muppets. Una guía ideal para ir tras el efecto sanador de la risa en estos tiempos inciertos
En el libro de 1981 Cult Movies, Danny Peary escribió -tratando de establecer una definición canónica- que una película de culto es aquella que despierta un fervoroso entusiasmo mucho tiempo después de su estreno. Películas especiales que cautivaron los corazones de segmentos específicos de la audiencia cinéfila, que por diversas razones fueron especialmente valoradas, protegidas y defendidas. Peary explica que muchas veces estas películas son controversiales ya sea en su temática o calidad, pero extraordinarias para los que se ocupan de buscar en ellas las cualidades especiales que el público común o incluso la crítica ignoró en su momento.

Muchas veces el término “de culto” se usa para el cine de género, ese que recorre el circuito de festivales de medianoche: el terror, la ciencia ficción, la fantasía, el exploitation, y todo el cine descrito por letras del abecedario posterior a la B (Cine zeta, cine berreta, nos decían los entrañables cuervos del ciclo emitido en la señal de cable argentina I-sat a comienzos de los años 2000). A los efectos de esta lista, sin embargo, decidí centrarme en un género ideal para estos tiempos pandémicos que corren: la comedia, un género que según algunas estadísticas, ha generado más interés recientemente en los espectadores. Quizás porque en estos tiempos de tanta incertidumbre y angustia es más fácil buscar el efecto sanador de la risa que tensionarse con un thriller o asustarse con una película de horror.

Es un ejercicio interesante (por no decir difícil) buscar películas de culto que estén disponibles para ver legalmente on-demand en Latinoamérica, pero dada la ausencia de estrenos en cine hasta por lo menos más entrada la segunda mitad del año, el catálogo de streaming es acaso la única posibilidad para el espectador ávido de contenido de conectar con la experiencia cinematográfica.

Las trincheras de las guerras del streaming se vuelven cada vez más intensas, como describe de forma diaria en su newsletter @CortaCableNews el periodista Ignacio Esains. Muchas veces el debate pasa por la adquisición de productos conocidos que garanticen una cantidad amplia de fans (Friends, Seinfeld) o la producción de originales y recién finalmente y mucho después, por el acceso a un catálogo amplio y diverso.

En Estados Unidos el panorama es menos desolador que aquí, dada la existencia de servicios de nicho como The Criterion Channel o Shudder. En cambio, nosotros debemos conformarnos con los mencionados originals y un catálogo disminuido que se centra más que nada en blockbusters del siglo XXI, y en el caso particular de la comedia, en la proliferación de especiales de Stand-Up.

Por fuera de eso las opciones son limitadas y por eso el lector interesado en esta lista de comedias de culto quizás encuentre ausencias notables -más allá de la arbitrariedad de toda lista- pero es importante que todas las películas mencionadas están disponibles en este momento en los diferentes servicios on-demand a los que podemos acceder en nuestra región.

La vida de Brian (Life of Brian, Terry Jones, 1979)

Trailer de » La vida de Brian» (Life of Brian, Terry Jones, 1979)


Estrenada en medio de grandes controversias por su punzante sátira religiosa, La Vida de Brian es uno de los (muchos) puntos altos de la carrera de la crew de comediantes británicos formada por, entre otros, Terry Gilliam (Brazil, Pánico y Locura en Las Vegas) y Terry Jones. La Vida de Brian cuenta la vida de Brian Cohen, una persona que es confundida por el mesías por haber nacido muy cerca de Jesús. A partir de esta premisa sencilla y atractiva (lo que la industria del cine llama high concept, una idea breve que se puede contar en un viaje corto de ascensor), los Monty Python construyen una de las comedias más delirantes y graciosas jamás realizadas, sin perder por un segundo un ápice de inteligencia, con gags visuales y juegos de palabras que se multiplican a medida que avanza la película.

Una secuencia totalmente lisérgica que involucra aliens, sin lógica ni explicación alguna, es uno de los grandes momentos. Quienes deseen continuar con el trabajo de los Monty Python puede hacerlo con Los Caballeros de La Mesa Cuadrada, o las cuatro temporadas de Monty Python’s Flying Circus, el programa de sketches de la troupe. Todo está disponible en Netflix.

«La vida de Brian» – Queremos al mesías


Los Muppets toman Nueva York (The Muppets Take Manhattan, Frank Oz, 1984)

Trailer de «Los Muppets toman Nueva York» (The Muppets Take Manhattan, Frank Oz, 1984)


Los Muppets, el grupo de títeres creado por Jim y Jane Henson en los años ’50 sigue vigente al día de hoy a través de un gran imperio multimedia del cual hoy Disney es dueño. Eso le permitió a los personajes ganar exposición en el mainstream nuevamente a través de dos películas recientes: Los Muppets (2011), y Muppets 2: Los Más Buscados (2014), dirigidas por James Bobin, co-escritas por el director de comedia americana Nicholas Stoller, y que contaron con figuras como Jason Segel, Amy Adams, Tina Fey y Ricky Gervais.

Durante la temporada 2015-2016, la breve serie de ABC The Muppets les permitió a los clásicos personajes llevar su humor a un formato de mockumentary cercano estéticamente a The Office y Parks and Recreation. ¿Pero qué hay acerca de toda la historia previa de los famosos títeres? En streaming se puede disfrutar de la película de 1984, Los Muppets Toman Nueva York, que funciona como una especie de cierre de trilogía luego de las dos películas para cine iniciales (la siguiente, Una Navidad con los Muppets, llegaría en 1992, dos años después de la muerte de Jim Henson).

Quizás alejada en tono de lo que normalmente, como mencionamos más arriba, consideramos una película de culto, no por eso Los Muppets Toman Nueva York debe ser menospreciada: es una película inteligente, clásica, con grandes canciones y personajes carismáticos. Además, introduce a los muppets bebés, que pronto tendrán su nueva versión en Disney+.

‘Pero Siempre Yo Te Amaré’, de «Los Muppets toman Nueva York»


El insoportable (The Cable Guy, Ben Stiller, 1994).

Parece que sucedió hace muchísimos años, pero hubo una breve época a mediados de los ’90 en la que Jim Carrey estaba entre las estrellas mejor pagas y más conocidas de Hollywood. Su 1994 es memorable: Ace Ventura: Detective de Mascotas, La Máscara y Tonto y Retonto dieron a conocer mundialmente a un comediante mitad ser humano, mitad cartoon. Luego llegarían los dramas exitosos como El Show de Truman o Eterno Resplandor de Una Mente Sin Recuerdos. Pero en el medio, esta comedia de los ’90s resulta interesante por una multitud de razones.

El Insoportable es una suerte de thriller de acoso en versión comedia negra que reemplaza a la Glenn Close de Atracción Fatal por un Jim Carrey maníaco y con problemas patológicos para relacionarse, que se pega como una garrapata a un inocente Matthew Broderick. De fondo, Ben Stiller, lejos de su debut directorial indie Generación X, aparece también frente a la cámara en fragmentos de un juicio ficcional y ultra-mediático que le dan a la película un ángulo satírico sobre el rol de los medios y la televisión. Completan el reparto un joven Jack Black y una temprana aparición de la gran Leslie Mann, que conoció a Judd Apatow (su eventual marido y productor tanto de El Insoportable como de prácticamente toda la comedia de la década del 2000) en castings de esta película.

Escena del karaoke -Somebody to Love- de «El insoportable»


Beetlejuice (Tim Burton, 1988)

Trailer de «Beetlejuice» (Tim Burton, 1988)


Tim Burton es el director de culto por antonomasia, y la etapa de su filmografía que va de 1985 a 1999 está llena de excelentes películas y al menos un par de obras maestras. Entre la época de Beetlejuice y el Batman de Michael Keaton hasta El Jinete sin Cabeza parecía que no habría forma de que fallara. Luego su carrera se volvió más irregular, pero la mayor disponibilidad de películas de Amazon permite acceder a uno de sus primeros éxitos y uno de sus personajes más entrañables, uno que se encuentra lejos del piloto automático de los personajes tardíos de Johnny Depp o incluso de cierta melancolía afectada que es tanto un rasgo distintivo como una señal de repetición en muchas de sus películas.

Pero en Beetlejuice, ese acercamiento caricaturesco (Burton empezó en la animación) a la estética propia del gótico o el expresionismo alemán está mucho más cerca de una sensibilidad juguetona y pop. A la energía maníaca de Keaton se suman Winona Ryder, Alec Baldwin y Geena Davis, un cast que ya de por sí vale la pena.

‘Jump In The Line (Shake Senora)’, de Beetlejuice


El gran Lebowski (The Big Lebowski, Joel & Ethan Coen, 1998)

Trailer de «El gran Lebowski»(The Big Lebowski, Joel & Ethan Coen, 1998)


Quizás el arquetipo de película de culto. El Gran Lebowski no gozó de gran éxito en la taquilla al momento y recibió críticas mixtas. Con el tiempo se volvió una favorita de multitudes, despertando fervor al punto de tener festivales exclusivos. Es tal su actualidad que hay referencias a ella en Avengers: Endgame, en lo que seguramente fue un diálogo improvisado por Robert Downey Jr. Basta comparar al Thor de esa película con El Dude de El Gran Lebowski para entender el guiño.

Más allá de los aspectos icónicos de los personajes y sus looks, El Gran Lebowski sobresale por su trama, mezcla de policial de Raymond Chandler con comedia stoner, sus encuadres y guión milimétricos y su gran soundtrack lleno de cortes eclécticos. Los Hermanos Coen son maestros del cine que han hecho maravillas en géneros diversos, pero esta película rankea alto no sólo en su propia filmografía sino en las comedias y películas de los ’90 en general. Absolutamente imprescindible.

Escena de «El gran Lebowski»


¿Y dónde está el piloto? (Airplane, Zucker-Abrahams-Zucker, 1980)

Trailer de «¿Y dónde está el piloto?» (Airplane, Zucker-Abrahams-Zucker, 1980)


Inspirada en las películas de desastre de la década del ’70, ¿Y Dónde Está El Piloto? es la comedia definitiva de los ’80. O al menos, es la película definitiva de un tipo específico de comedia que al momento de su estreno se encontraba en desuso y que hoy tampoco encuentra grandes exponentes. Un estilo de comedia visual y físico, donde los gags y el slapstick proliferan minuto a minuto entre los actores, el escenario, el vestuario, y en diversos lugares del encuadre, haciendo que la lógica se pierda por completo en un mundo donde los actores se comportan como si no pasara nada mientras la realidad se desdobla frente a ellos de las formas más surrealistas y chistosas.

Después de este hito en la comedia llegaron otros, como la notable Top Secret! (con un gran Val Kilmer) y otras sagas de éxito (Locos del Aire, La Pistola Desnuda), hasta que eventualmente el estilo de humor paródico del equipo se degeneró al punto tal que sólo quedó una mera cáscara: las infames películas del estilo de Scary Movie, Date Movie et al. Cada tanto esta escuela de humor resurge: en la serie de Rashida Jones Angie Tribeca, o en la película y series de Wet Hot American Summer, de David Wain, pero siempre es necesario volver a la original.

Escena de «¿Y dónde está el piloto?»


Muertos de risa (Shaun of The Dead, Edgar Wright, 2005)

Trailer de «Muertos de risa» (Shaun of The Dead, Edgar Wright, 2005)


Edgar Wright es el director millennial de películas de culto por excelencia. Toda su obra es imprescindible: desde la serie de televisión británica Spaced (que lo reunió por primera vez con el dúo de comediantes Simon Pegg y Nick Frost) hasta su musical de autos Baby Driver. La pandemia nos privó de su última película Last Night in Soho, que se retrasó hasta abril del 2021. Afortunadamente se pueden ver varias del director en streaming al día de hoy: Scott Pilgrim vs The World, la épica comic-book movie con Michael Cera y Mary Elizabeth Winstead que cumplió diez años hace poco, la brillante Arma Fatal, que homenajea las buddy movies de acción de los ’80 y ’90 y el enorme debut del director, Muertos de Risa (o El Desesperar de los Muertos en Amazon).

En un ajustadísimo mashup entre rom-com clásica, coming of age tardío y película de zombies, Edgar Wright muestra ya desde su primer film una gran capacidad para contar personajes de forma totalmente empática, mezclando historias profundamente humanas en medio de acción fantástica y estilizada, y una capacidad virtuosa para encuadrar y generar tensión en planos que recuerdan a John Carpenter o a Los Usurpadores de Cuerpos (la de 1978 con Donald Sutherland).

Escena de «Muertos de risa»


7 Días En El Infierno y Tour de Pharmacy (Jake Szymanski, 2015) / (Murray Miller, 2017)

Trailer de «7 Días En El Infierno»


Si mezcláramos el estilo vodevilesco y ridículo de hacer comedia de los Zucker-Abrahams-Zucker con los chistes, los remates en los diálogos por montaje y las improvisaciones de la escuela de Judd Apatow, podríamos obtener como resultado a Andy Samberg, que con su crew The Lonely Island nos dio varias comedias contemporáneas memorables como Hot Rod – Saltando el Destino o Popstar: Los Popstars Nunca se Detienen. Mencionar estos poco vistos especiales de HBO quizás sea hacer trampa, ya que ninguno de ellos son realmente películas, sino especiales de 40 minutos. Pero definitivamente deberían estar incluidos en un ránking de comedias de culto y hacen una gran función doble.

En 7 Días En El Infierno Samberg hace del ‘‘chico malo del Tenis» Aaron Williams, un tenista virtuoso y rebelde que debe hacer frente a un partido de tenis de una semana entera, mientras que en Tour de Pharmacy interpreta al ciclista Marty Hass durante el Tour de France de 1982, que en este falso documental aparece tan lleno de figuras de la comedia como de drogas ilegales. Filmados como verdaderos especiales de deporte y con la aparición de figuras reales como Serena Williams y Lance Armstrong, 7 Days in Hell y Tour de Pharmacy son tan desopilantes como imperdibles.

Trailer de «Tour de Pharmacy»


Policías de repuesto (Adam McKay, 2010)

Trailer de «Policías de repuesto» (The Other Guys, Adam McKay, 2010)


Mencionar una película de un director nominado al Oscar por sus dramas, producida por Judd Apatow y con dos estrellas conocidas y muy reconocibles quizás escapa a las posibilidades de lo que una película de culto debería ser por definición. Pero por un lado, todo ránking de comedia debería tener al menos una película de los 2000 producida por Apatow y, por otro, esta película es tan, pero tan graciosa que se hace ineludible mencionarla. Además, dentro de las realizadas por la dupla Will Ferrell-McKay quizás no es tan conocida como El reportero: La Leyenda de Ron Burgundy, acaso el mayor éxito de esa colaboración.

Su temática tangencialmente relacionada con la especulación financiera la hace un antecedente ideal a The Big Short, esa película en la que McKay decidió virar definitivamente al drama con comentario social. Aquí en cambio, se dedica a ejercer con gran virtuosismo la comedia gruesa, con unos Will Ferrell y Mark Wahlberg dando lo mejor como dos policías uno más inepto que el otro. Se suman un prólogo memorable con Dwayne Johnson y Samuel L. Jackson, y un hilarante Michael Keaton (volviendo a mostrar que es un actor de comedia gigante), lo que da como resultado una película que reclama estatus de culto ya mismo.

Escena de «Policías de repuesto»


Mundo fantasma (Ghost World, Terry Zwigoff, 2001)

Trailer de «Mundo fantasma» (Ghost World, Terry Zwigoff, 2001)

Fuente: Infobae