Mario Vargas Llosa fue elegido miembro de la Academia Francesa y se suma a «los inmortales»

El escritor hispanoperuano, Premio Nobel de Literatura 2010, fue elegido miembro de la Academia Francesa y estrena el cargo de primer autor que no escribe en lengua francesa en integrar la institución fundada en 1635, cuyos miembros son conocidos como «los inmortales».

El escritor hispanoperuano, Premio Nobel de Literatura 2010, fue elegido miembro de la Academia Francesa y estrena el cargo de primer autor que no escribe en lengua francesa en integrar la institución fundada en 1635, cuyos miembros son conocidos como «los inmortales».

El autor de «Pantaleón y las visitadoras», «La ciudad y los perros» y «Conversación en la Catedral», referente del boom latinoamericano entre los 60 y 70 y actualmente un ensayista polemista y liberal en temas sociales y políticos, toma la silla vacante que dejó Michel Serres, tras ser elegido por 18 votos en un sufragio de 22 votos, de acuerdo al comunicado de la institución.

Miembro de la Real Academia Española desde 1994, Vargas Llosa ingresa a la institución con dos excepciones: por un lado, es el primer autor que no escribe en lengua francesa y por el otro, tiene 85 años de edad y desde 2010 las reglas para el ingreso a la institución es que los candidatos sean menores de 75 años. Los motivos para saltear esas normas son el profundo vínculo cultural que tiene con el país galo y los ensayos que ha dedicado a obras emblemáticas producidas en Francia.

Su ingreso, sin embargo, no cambia la dinámica de cupo entre varones y mujeres, puesto que de los 40 sillones de la institución, cinco siguen vacantes, mientras que los 35 que restan están ocupados por 29 varones y apenas 6 mujeres.

Denominados «los inmortales», los miembros de la Academia visten un traje de color oscuro bordado con ramas de olivo verdes y doradas; además cada miembro tiene una espada.

Como indica la agencia de noticias AFP, en la historia de la Academia Francesa hubo escritores bilingües, como el periodista y escritor argentino Héctor Bianciotti (1930-2012), que publicó una parte de su obra en español. Pero Vargas Llosa es el primero que entra sin haber escrito directamente en francés, porque si bien habla la lengua con fluidez -vivió allí un tiempo- nunca publicó un libro en ese idioma.

Cercano a la cultura francesa, Vargas Llosa dedicó ensayos y artículos a libros y autores francesas, como el título que publicó en 2004, «La tentación de lo imposible» a propósito de «Los Miserables» de Victor Hugo, cuyos engranajes intenta desentrañar en el ensayo. A esa obra, sumó después el ensayo «La orgía perpetua» sobre «Madame Bovary» de Gustave Flaubert. Además, gran parte de su obra fue traducida al francés, principalmente por la famosa editorial Gallimard.

Si bien Vargas Llosa fue elegido por los miembros de la Academia, la decisión de su ingreso requiere la aprobación del presidente, Emmanuel Macron. Una vez realizada la aprobación del llamado protector y la posterior ceremonia, el escritor hispanoperuano podrá hacer posesión de la silla número 18.