Crucigrama: Alejandro de Tomaso

El culto de los autos, de San Isidro a Módena – Por Norberto Tallón, especial para DiariodeCultura.com.ar.

Nacido en Buenos Aires, el empresario Alejandro De Tomaso (10 de julio de 1928), fundó empresas automovilísticas, su vida estuvo siempre ligada a los automóviles deportivos y de competición. Si bien vivió la mayor parte de su vida en Italia, nunca renunció a la nacionalidad argentina.

Su padre era argentino de primera generación, hijo de inmigrantes pobres originarios de Italia (el apellido original era «di Tommaso»), pero alcanzó una importante relevante posición económica. Por parte de madre, descendiente del Virrey Pedro de Cevallos, el primero del Río de la Plata, ese lado materno lo acercó a una amistad de niñez con Ernesto “Che” Guevara y por otras relaciones existentes en su infancia conoció, a Juan Domingo Perón.

Se dedicó durante una época a las competencias automovilísticas y la vida política. Con una antigua Bugatti corrió hasta 1954, cuando a bordo de una Maserati, participó de los 1.000 Kilómetros de Buenos Aires (resultó segundo en su Clase y séptimo en la General y un año más tarde, ganó esa misma carrera en su categoría (cuarto en la clasificación total) con Maserati A6GCS 2L, de mayor potencia.

Vinculado con Roberto J. Noble colaboró en la fundación del diario Clarín y escribió en él sobre economía. Las actuaciones en política causaron problemas, por lo que, manejando su propio avión, emigró al Uruguay, con el dinero de la venta de un campo de su mujer, Lola Güiraldes, a quien dejó con sus 3 hijos. Luego viajó a Italia, lugar de origen familiar, y se instaló en Bologna para iniciar otra historia.

Era cuando el “Chueco” Juan Manuel Fangio y el “Cabezón” José Froilán González sobresalían en Europa. Con aquellos antecedentes del autódromo porteño y su fortaleza financiera, logró un asiento en la Scuderia Centro sud-OSCA, de los hermanos Bindo, Alfieri, Ettore y Ernesto Maserati, pilotó en los grandes premios de Fórmula 1 en 1957 (Autódromo Municipal Buenos Aires-La Argentina) y 59 (Sebring International Raceway-Florida/Estados Unidos).

En tanto, también, emprendía el diseño y fabricación de lujosos autos deportivos. Se casó con la estadounidense Elizabeth Isabelle Haskell, nieta de William Crapo Durant, primero cofundador de General Motors y luego socio de Louis Chevrolet. Esto le reportó el ingreso al mercado norteamericano y, además, cumplió el sueño de correr las 24 Horas de Le Mans (1958) con un OSCA-Maserati; consiguió el undécimo lugar en la General y ganó su categoría (Clase S750). Las carreras de autos siempre estuvieron en su corazón.

En el 59, el matrimonio se mudó de Bologna a Módena y abrieron taller propio: Automobili De Tomaso. Allí nació el logo, que simulaba la misma marca de su padre en el ganado del campo argentino. Una “T” con una bandera argentina vertical por detrás.

Producía en pequeña escala. El inicial fue el De Tomaso Spyder (1965), le siguió la cupé biplaza Vallelunga, quizás con mayor atracción como auto de calle, que deportivo específicamente. Más tarde, en 1966, el Mangusta, una evolución del anterior, diseño de Giorgio Giugiaro y carrocería de Giacinto Ghia. A pesar de la relación de su esposa con GM, todos sus productos tuvieron motor Ford.

Entre esos modelos y otras adquisiciones, en 1969, fue convocado por Lee Iacocca para participar del diseño del Ford Mustang. Momento en que conoció a Henry Ford II, que sabía que los deportivos llevaban su mecánica e interesado en que realizara el auto para vencer a Ferrari, como lo habían hecho con el GT40 en Le Mans. Ford adquirió el 80% de las empresas del argentino, y aceleró la aparición del que sería símbolo de la marca: el De Tomaso Pantera. Lanzado en el 71 fue un gran éxito comercial. Elvis Presley fue uno de sus primeros compradores. El auto previo al Pantera, fue otra cupé llamada Mangusta, de 1976.

El éxito que tuvo con un auto de F2, lo llevó a un paso siguiente. En 1970, con nueva inyección de dinero, se propuso fabricar su propio F1, el De Tomaso 505. Frank Williams, gestor deportivo, Giampaolo Dallara, el diseñador, y el británico Piers Courage al volante. Corrieron cuatro GP’s, con un buen noveno puesto en la Qualy en Mónaco, pero no finalizaron ninguna carrera. Peor fue en Circuit Park Zandvoort (Países Bajos) con la tragedia del despiste y muerte del piloto, reemplazado hasta fin de año por el australiano Tim Schenken, siempre sín llegar a la bandera a cuadros.

En el 73 compró Moto Guzzi y en 1976 también Innocenti y Maserati. De esta última fue dueño hasta mediados de los ’80 y de Innocenti hasta el 90, ambas vendidas a Fiat. Entonces hizo evoluciones personalizadas de algunos Pantera, con la idea, nunca concretada, de impulsar una nueva generación, que nunca concretó. En total se fabricaron durante 20 años, 7.200 De Tomaso Pantera. El último salió de producción en 1992.

A los 74 años murió, en la madrugada del primer día del invierno de 2003, en Módena, a consecuencia de dolencias anteriores.

A un clic de distancia, la realización de “Doppio Corpo” ([email protected]) en su canal de YouTube: “De Tomaso Story -La storia di Alejandro e delle sue De Tomaso” (La historia de Alejandro y sus De Tomaso), documental subtitulado que reconstruye la historia, con el debido relato, detalles técnicos de cada máquina, entrevista al corredor Saverio d’Emilio. El video se conjuga con el desarrollo básico de los hechos destacados en la columna, además los autos se “mueven” a velocidad para “verlos” o con el acelerador a fondo y rugiendo.

Cuídense.

Norberto Tallón