Crucigrama: Corto Maltés

El viajero de la aventura – Por Norberto Tallón, especial para DiariodeCultura.com.ar.

Corto Maltés o Corto Maltese, según su “historia relatada” desde la ficción, nació en la capital de Malta: La Valetta, hijo de una gitana sevillana (La Niña de Gibraltar) y un marinero inglés, de Cornualles, en 1887. Súbdito británico con residencia oficial en la antillana La Antigua. Su infancia transcurrió en la española Córdoba. Allí el rabino Ezra Toledano lo inició en la Cábala y el Talmud. Una amiga de su madre, en una ocasión, le leyó la mano y descubrió que carecía de “línea de la fortuna” y él, con la navaja de afeitar de su padre, se grabó una que intentó ocultar siempre.

A los 13 años Egipto fue el destino de su primer viaje. Después Manchuria durante la Rebelión de los Bóxers, donde comenzaron sus hazañas con la destrucción de un cañón. Luego, casi un lustro después, apareció inmerso en la Guerra Ruso-Japonesa. Conoció a un joven escritor (Jack London) que le presentó a un personaje recurrente en su futuro, que semeja como su “Alter Ego”: Rasputín, un desertor ruso homicida, neurótico, ambicioso y egoísta, con quien compartió una relación extraña con muchas aventuras. Juntos fueron a Sudáfrica en búsqueda de las minas del rey Salomón, pero los sorprendió un motín de la tripulación del barco que los abandonó en el mar. Rescatados por un carguero con destino en la Argentina, lugar en que conoció a Butch Cassidy y Sundance Kid. Tras cinco años de transitar por diferentes lugares, en Italia encontró a Zhugashvili, un georgiano que, en el tiempo, conduciría la Unión Soviética con el nombre de Stalin. Volvió a la Argentina, viajó a las Antillas, India, China, New Orleans…

En 1910 trabajó en el “Bostonian”, un barco que realizaba el trayecto Boston-New York, como segundo oficial a bordo, pero cayó en desgracia por defender al grumete John Reed, acusado de una muerte; debió debe abandonar su tarea y se dedicó a la piratería en una organización al mando del misterioso “El Monje”, cuya tripulación se levantó para robarle la mercancía y lo dejó atado en una balsa a la deriva. Rescatado (comienzo de “La Balada del mar salado”, primera publicación de sus circunstancias esenciales) reencontró a Rasputín y coincidió con Pandora Groovesmore (el amor platónico de su vida) y su primo Caín.

Se encontró en Brasil, por 1916, en dirección a la desembocadura del Amazonas, convergió con una bruja centenaria, “Boca Dorada”, que le contó haber conocido a sus antepasados. Participó en un combate de los “cangaceiros” contra un coronel brasileño dictatorial, terminó inmerso en operaciones de la Gran Guerra en esa zona.

Luego viajó a Italia, Montenegro e Irlanda. Aquí, envuelto en acciones del IRA contra del ejército inglés. Saltó a Francia, Somalia y Etiopía. Se estableció un período en Hong Kong, a donde regresó más tarde tras un largo periplo. Con Rasputín, otra vez, se dirigió a Siberia en un intento de robo de las joyas de la familia real rusa. A comienzos de la década del 20, era ubicable en Venecia, donde apareció en medio de enfrentamientos entre masones y pistoleros de la naciente Italia fascista. Pasó por Samarcanda y cayó prisionero del Ejército Rojo.

Volvió a la Argentina, en junio de 1923, y encontró a antiguos conocidos. El año siguiente, pasó por Suiza, vivió un proceso interior, inducido por un brebaje mágico o alucinógeno llamado “filtro de Paracelso”, que rejuveneció a su propia mente. En ese especial periplo, conoció a Hermann Hesse. Se sumergió con Rasputín en el Pacífico en busca del continente perdido de Mu y en un intento de descubrir el origen de la humanidad. ç

Una versión (hay otra de un futuro tranquilo) de su desaparición lo sitúa alistado en las Brigadas Internacionales para luchar por la República en la Guerra Civil Española y que allí ocurre.

“Corto Maltese” es una serie de cómics de aventuras o historietas, creada Hugo Pratt en 1967. Elogiada como una de las artísticas y literarias jamás escritas. Traducida a numerosos idiomas y adaptada a varias películas de animación, con muchísimas referencias al mundo y personajes reales y su presencia a lo largo de la leyenda. Pratt fue un historietista italiano (1927, Rímini-Italia)–1995, Pully-Suiza). Creó a “Corto” en 1967 para la revista italiana (país donde residió unos años y creó otros importantes protagonistas del Género) “Sgt. Kirk” (Homenaje al héroe “inventado” por Héctor Germán Oesterheld y dibujado por él mismo).

Al comienzo de esta columna, se pudo (o se puede ahora, si se omitió) ver el tráiler español de la película animada “Corto Maltés: La Corte Secreta de los Arcanos”. Producción franco-italiana-luxemburguesa dirigida, en 2002, por el parisino Pascal Morelli. Estrenada el 6 de agosto de ese año, en el Festival de Cine de Locarno (Suiza).

Ahora a un clic de distancia, grabado en vivo en el Teatro Ópera de Buenos Aires (2017) Jairo y Juan Carlos Baglietto cantan, composición de Mario González (Jairo), “La Balada del Corto Maltese”.

Cuídense mucho, realmente mucho.

Norberto Tallón

@betotallon