Crucigrama: Don Inodoro, el Mendieta y Boogie…

Lo siguen extrañando – Por Norberto Tallón, especial para DiariodeCultura.com.ar.

Y cómo no extrañarlo… Trece años sin el Negro, sin aquel café de fin de la mañana, en Suipacha al 900, en las venidas a Buenos Aires. El Negro Fontanarrosa (Roberto Alfredo Fontanarrosa) por una maldita y rara enfermedad neuromuscular, que desde unos meses atrás le impedía dibujar, murió en Rosario, con 62 años de edad, el 19 de julio de 2007.

Humorista, escritor, guionista y dibujante. Su carrera comenzó por 1968 en la rosarina revista “Boom” y, a posteriori, en “Zoom” y “Deporte 70”. La calidad, rapidez y seguridad en sus dibujos hicieron que su trabajo fuera muy frondoso. Allá por 1973 dibujó en las revistas “Hortensia” y “Satiricón” y en el matutino “Clarín”.

Surgieron, por entonces los personajes del título, reconocidos por los lectores: “Boogie, el Aceitoso”, matón a sueldo e ideas muy particulares y el gaucho “Inodoro Pereyra”, el “renegado” con su perro “Mendieta”. El Negro decía, explicando a éste último, que además habla, “es muy difícil meter un caballo en un cuadrito de historieta, por tanto apareció un perro. Y se llama Mendieta porque me causaban gracia los perros con nombres humanos”. Ambos transcendieron la Argentina, en algunos lugares con las tiras diarias y otras con libros.

“Fanático” del fútbol y de Rosario Central, su preferencia por el “Canalla” cruzó su vida, también lo jugó hasta que pudo hacerlo. Una vez me dijo por el “entusiasmo” puesto en la cancha: “Pensaba con los años se pasaba, pero hoy es peor que antes”. Ese amor por este deporte lo llevó a crónicas periódicas (semanales, diarias en copas y mundiales) en el relato de lo que ocurría en la visión de “exóticos” personajes.

En los ‘70 y ‘80, en tiempo libre (o veces no) era habitúe de una mítica “mesa de los galanes” del bar “El Cairo” (esquina de Santa Fe y Sarmiento en la “Chicago argentina”), escenario de muchos de sus mejores cuentos. Por la década del 90, la mesa se mudó al bar “La Sede” hasta la reapertura del sitio original. Una frase: “al cielo, le pondría canchitas de fútbol y un par de bares, porque en el bar estás en tu casa y a la vez estás balconeando la calle”. Enamorado de su “pasaporte”, contaba que “Los rosarinos somos creativos, a falta de paisaje Rosario tiene lindas minas y buen fútbol. ¿Qué más puede pretender un intelectual?”.

Publicó 12 recopilaciones de chistes, sus historietas (“Inodoro” 32 tomos, “Boogie 12”), 3 novelas, género en que debutó con “Best Seller -Las aventuras del mercenario sirio homónimo-” (1981) y 15 libros de cuentos. Tuvo distintas participaciones en el cine, desde guionista hasta actor. Sus cuentos arribaron, escenificados, al teatro y a la televisión.

Se casó dos veces; con su primera mujer fue padre de Franco. En 2003 le diagnosticaron esclerosis lateral amiotrófica, un mal degenerativo en la salud. El 18 de enero de 2007 anunció que dejaba de dibujar y aclaró que seguía con los guiones. Entonces Crist (Cristóbal Reynoso) ilustró los chistes sueltos y Oscar Salas las historietas de “Inodoro Pereyra”.

Recibió los premios: “La Catrina” en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, en el marco del Encuentro Internacional de Caricatura e Historieta. Konex de Platino (1994). Diploma al Mérito (1992, 2004 y 2012, éste último “in memoriam”). El 26 de noviembre fue instituido Día Nacional del Humorista, en conmemoración de su nacimiento.

Expositor en el III Congreso de la Lengua Española que se desarrolló en Rosario, el 20 de noviembre de 2004, ofreció la charla titulada “Sobre las malas palabras”. Sin abandonar una “línea académica” disertó y el humor le otorgó una visión y llegada aplaudida y recordada. “¿Por qué somalas las malas palabras? ¿Les pegan a las otras? ¿Son de mala calidad?”, se interrogó. A un clic de distancia, esos minutos con un inolvidable “Negro en Estado Puro»…

Cuídense.

Norberto Tallón

Twitter: @betotallon