Crucigrama: Un mimo, él Mimo

Marcel Marceau – Por Norberto Tallón, especial para DiariodeCultura.com.ar.

Con el nombre de Marcel Mangel, en una familia de religión judía, bajo el signo de Aries, nació en Estrasburgo -Francia-. Cuando tenía cuatro años se mudaron a Lille, para retornar a su ciudad natal en la adolescencia.

En la Segunda Guerra Mundial tuvieron que dejar su casa cuando los alemanes invadieron el país, huyeron a Limoges y su padre, arrestado por la Gestapo, fue deportado al campo de concentración de Auschwitz. Con su hermano, Alain, adoptaron el apellido Marceau para ocultar sus orígenes, se unieron a la Resistencia y más tarde se sumaron a las fuerzas de la Francia Libre conducidas por el general Charles De Gaulle.

Su carrera, tras la Gran Guerra, comenzó como mimo en Alemania, actuando para las tropas francesas de ocupación. Recibió la condecoración de Oficial de la Legión de Honor francesa.

Luego de esa experiencia y tras ver a Charles Chaplin, surgió su interés por la actuación. Decidió, entonces, estudiar en la Academia de Arte Dramático Charles Dullin, en el Teatro “Sarah Bernhardt” de París. Dullin y Étienne Decroux advirtieron su talento excepcional y lo invitaron a que se integrara a su compañía. Interpretó a “Arlequín” en la pantomima “Baptiste”. La interpretación en su primer mimodrama “Praxitele and The Golden Fish” le valió ganar una fuerte aclamación.

En 1947 creó a “Bip”, el payaso con un suéter a rayas y un maltratado sombrero de copa decorado con una flor (representación de la fragilidad de la vida) que se convirtió en su alter ego, si se quiere, similar al vagabundo chaplinesco.

Las desventuras de “Bip” con todo, absolutamente todo lo que le rodea, no tienen límites. Su estilo de la pantomima no ha tenido par y sus ejercicios silenciosos incluyen representaciones convertidas en clásicos: la caja, caminar en contra del viento, el hacedor de máscaras, son simples ejemplos.

Fue también pintor, recibió importantes premios y honores por su arte y patriotismo.

Trabajó en cine y hay que destacar una graciosa curiosidad. En el filme “La Última Locura de Mel Brooks”, titulo español para “Silent Movie (Película Muda)” es Marcel Marceau el único que habla y pronuncia un “Sí”.

Falleció a los 84 años, el 22 de septiembre de 2007. Sus restos descansan en el  cementerio de Père Lachaise, ubicado en la Rue du Repos del XX Distrito, el más grande de la ciudad de París y uno de los más famosos del mundo.

Sin Palabras.

Norberto Tallón

(Twitter) @betotallon