Personajes en Letra, Imagen y Sonido
Carlo Gesualdo (Parte 1). Por: Estela Telerman, especial para Diario de Cultura
Una de las figuras más significativas del Renacimiento italiano fue el compositor Carlo Gesualdo, príncipe de Venosa y conde deConza (1566-1613) (*) cuyos osados, insólitos y dramáticos recursos armónicos han marcado un hito en la historia universal de la música coral. Como creador, su estilo influyó en la composición de madrigales de algunos compositores de la época, si bien más allá del siglo XVII, Gesualdo fue olvidado hasta su redescubrimiento en el siglo XX como creador. Su nombre figura en todos los libros de historia de la música de su época y varias biografías se han escrito sobre este compositor. Si bien su obra ha sido objeto de infinitos análisis y gran número de grabaciones, la turbulenta, oscura y novelesca vida de este torturado ser ha inspirado un inmenso número de obras musicales, literarias, teatrales y cinematográficas.
Nacido en el seno de una familia aristocrática, Carlo Gesualdo se casó a los 20 años con su prima María de Avalos. Pocos años más tarde, habiéndola sorprendido en adulterio, la asesinó y descuartizó junto a su amante. Si bien el ensañamiento y salvajismo del crimen convulsionaron a la sociedad de esos tiempos, éste fue justificado en virtud del derecho y las costumbres de la época. En 1593 el compositor contrajo nuevamente matrimonio con Eleonora de Este, hija del duque de Ferrara, aunque se trató de un matrimonio inexistente en el que ambos llevaban vidas separadas Dos hijos del compositor murieron a edad temprana, sin haberse aclarado el motivo de la muerte por sofocamiento de uno de ellos. Gesualdo interpretó la muerte de sus hijos como un castigo divino y vivió atormentado hasta el fin de sus días. Con el objeto de ‘expulsar a los demonios’ solía someterse a prácticas masoquistas con jóvenes de su sexo, hasta que el 8 de septiembre de 1613 su cadáver fue hallado desnudo, aparentemente luego de una de estas sesiones. Según algunas fuentes su muerte fue voluntaria pero otras indican un asesinato por parte de alguno de los jóvenes con quienes se había flagelado.
Ya a fines del siglo XIX la vida de Gesualdo fue fuente de inspiraciones literarias. En 1875 el escritor francés Anatole France (1844-1924) (*) publicó una novela denominada El Pozo de Santa Clara (*), en la que evocaba el martirio de la primera esposa del compositor. Asimismo, esta vida tan tormentosa fue tema de la novela histórica Madrigal(1968)(*) del húngaro László Passuth (1900-1979)(*) y de una novela premiada : El Testimonio de Polvo (1985) (*) de Michel Breitman (1926-2009) (*).
En el cuento Clone (*), incluido en el libro Queremos tanto a Glenda (1980) (*) el escritor argentino Julio Cortázar (1914-1984)(*), en una excelente simbiosis toma como modelo una versión del Ricercare a 6 de La Ofrenda Musical de Johann Sebastian Bach, asignándole a cada personaje una de las líneas instrumentales de la obra. Además del artilugio musical, cruza dos historias: la de un grupo de madrigalistas que concluye una gira en la ciudad de Buenos Aires (donde se reflejan las relaciones de amor y celos entre sus integrantes) y la historia del príncipe, compositor y asesino Carlo Gesualdo. Este cuento inspiró la ópera de cámara Clone del compositor argentino Antonio Zimmerman (1971) (*), con libreto de Alejandro Tantanian (1966) (*). La obra se presentó en el Centro de Experimentación del Teatro Colón en 2007 con dirección musical de Mariana González Lanuza y puesta en escena de Cristián Drut. Zimmerman asignó cada voz a un cantante o a un instrumentista. En un entrecruzamiento temporal y espacial, el autor utilizó una viola de gamba barroca y un bandoneón.
Gran número de creaciones de compositores de los últimos dos siglos se inspiraron en Gesualdo, radical y vanguardista para su época. Igor Strawinsky (1882-1971)(*) orquestó y recreó varios de sus madrigales para el ballet de George Balanchine (19041983)(*) Monumentum pro Gesualdo (*) , estrenado en Nueva York en 1960. Parte de esta obra la podemos ver en http://www.youtube.com/watch?v=VsSZk0vgp7E
Según el compositor inglés Peter Maxwell Davies (1934) (*) conocer a su perturbado predecesor ha sido útil para descubrir aspectos ocultos de su propia personalidad. En 1972 compuso cuatro meditaciones sobre la oscuramente cromática música del compositor italiano, «Tenebrae Super Gesualdo», que publicó en dos versiones con ligeras variantes.Una de ellas, escrita para su grupo ‘The Fires of London’ las meditaciones instrumentales están separadas por tres interludios para voz y guitarra.
Salvatore Sciarrino (1947)(*) realizó arreglos para conjunto instrumental de varios madrigales de Gesualdo. En 1997, el compositor y violista australiano Brett Dean (1961) lo homenajeó en ‘Carlo’ una intensa obra para orquesta de cuerdas y sonidos electrónicos, que se puede escuchar aquí: http://www.youtube.com/watch?v=nxhGhqmu0Oc
El compositor y director Péter Eötvös (1944) (*) reconoce la influencia de Gesualdo en la creación de su obra a doce voces ‘Tres comedias Madrigalescas’ (compuesta entre 1963 y 1990)
En las próximas entregas continuaremos nuestro encuentro con obras inspiradas en este peculiar personaje que tan destacado lugar ocupa en la historia de la música universal.
(*) Los autores y manifestaciones artísticas en negrita señaladas por un asterisco pueden encontrarse en buscadores de internet. __________________________________________________
ESTELA TELERMAN pianista, docente, difusora de la música argentina, es columnista en Diario de Cultura. [email protected]