El sometimiento en Brasil fue violento y deshumano y se extendió durante más de 300 años. Fue el responsable de la esclavitud de millones de indígenas y africanos.
Esta práctica déspota se estableció en el país en la década de 1530, cuando las primeras medidas de la colonización fueron implementadas por los portugueses.
Esa sumisión ocurrió, en principio, con los nativos y, entre los siglos XVI y XVII, fue gradualmente suplantada por los ciudadanos africanos que llegaban a Brasil en los barcos negreros.
![Jose Mª Echarte Twitterissä: "“No es tanto, cuando las pones bien puestas [...]”. Hay unos planos de barcos negreros con la disposición de los esclavos que también estaban muy bien puestos.… https://t.co/1tl0COfMeU"](https://pbs.twimg.com/media/D6meOSgX4AEDq75.jpg)
La esclavitud fue instaurada por la corona lusa que necesitaba trabajadores manuales, una práctica detestada por estos europeos. Los primeros terratenientes llegados desde Lisboa, comenzaron a introducir africanos para las labores del campo. Nada de esto hubiese persistido en el tiempo si los hacendados de cafetales e ingenios azucareros, no se hubiesen sumado a la compra de hombres de raza “negra”.
El inicio del final de la opresión en Brasil comenzó con la “Carta de Alforría” (manumisión*), un documento que era otorgado o vendido a un esclavo, por su propietario, donde éste abdicaba a todos los derechos sobre su persona, otorgándole la libertad.
Entre los muchos esclavos que obtuvieron ese privilegio, estuvo “Chica da Silva”, una de las mujeres más conocidas del período en que Brasil era colonia de Portugal.
Fue la hija de un hombre blanco y una mujer de raza negra, esclava. Ella consiguió su libertad en su edad adulta y se convirtió en una de las mujeres más ricas del país al casarse con un empresario de piedras preciosas de la ciudad de “Diamantina”. Ese matrimonio, le permitió ascender socialmente e integrarse a la élite de la época.
Si bien fue aceptada por esa “casta” privilegiada, no dejó de ser una dificultad para las damas blancas que, a sus espaldas, manifestaban su marcado racismo, de manera sutil.
El nombre original de “Chica” era Francisca da Silva de Oliveira, hija de un militar blanco, llamado Antonio Caetano de Sá. Su madre era una mujer tiranizada, llegada en navíos esclavistas desde “Costa da Mina”, región del Golfo de Guinea.
El nacimiento de “Chica da Silva” fue fruto de un abuso sexual, en Minas Gerais. Si bien no hay fecha exacta del nacimiento, se estima que fue entre 1731 y 1735. En ese período, era común que las mujeres africanas fuesen ultrajadas sexualmente por los señores. Producto de ese infortunio, muchas de las que quedaban embarazadas, abortaban naturalmente, para que sus hijos no fuesen encadenados y castigados por sus amos.
La vida de “Chica da Silva” no fue nada fácil. Su destino inicial fue la esclavitud. Su padre no la liberó, por lo contrario, la vendió a un médico llamado Manuel Pires Sardinha, quien también la violó y producto de ese vejamen nació Simão Pires Sardinha.
- Manuel Pires Sardinha
A los 20 años llegó a Diamantina y en 1753 conoció a João Fernandes de Oliveira, empresario de diamantes, responsable de la explotación de piedras preciosas, considerado un hombre de fortuna, quien compró a su antiguo dueño a “Chica”, en 800 mil reis –moneda de entonces-, y luego la liberó.
Ambos asumieron una relación matrimonial pública, aunque nunca se casaron legalmente. De esa unión nacieron 13 hijos.
- João Fernandes de Oliveira
La relación con un hombre influyente, hizo que fuera aceptada dentro de la clase social más encumbrada de la ciudad y pasó de ser esclava a miembro del círculo social más selecto de Minas Gerais.
Xica llegó a tener muchas propiedades y una importante cantidad de esclavos, de los cuales pocos fueron liberados. Muchos entendieron que con ese proceder ésta mujer “negra”, había olvidado su origen, desconsuelo y la lucha por una reivindicación social, tan sufrida por los hombres, mujeres y niños de la época sometidos por sus dueños.
“Chica da Silva” falleció el 15 de febrero de 1796, sin conocerse la causa y fue enterrada en la iglesia San Francisco de Asís, lugar reservado solo a personas de raza blanca y de gran poder económico, hecho que evidenció, aún más, el grado de integración social de la ex esclava.
(*) Manumisión: es el acto y el resultado de otorgarle la libertad a una persona que estaba sometida a la esclavitud.
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