Un Argentino en la Triple Frontera: Las Misiones Jesuíticas 

Un Legado Cultural que data de los siglos XVII y XVIII – Por Alberto Antonio Curia especial para DiariodeCultura.com.ar.

Fue enorme la i,mportancia de las Misiones Jesuíticas nacidas en el corazón mismo de la selva tropical donde se ubican los vestigios de las cinco misiones: San Miguel de las Misiones (Brasil), San Ignacio Miní, Santa Ana, Nuestra Señora de Loreto y Santa María la Mayor (Argentina).

Estas construcciones en territorio guaraní datan de los siglos XVII y XVIII y se caracterizan por similares características pero no se conservan en el mismo estado.

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Existen cuatro en la Argentina ubicadas en el sur de la provincia de Misiones, donde  ocuparon lugares debidamente coordinados y bien organizados dentro de este territorio. El restante módulo de casi idénticas características se encuentra en Brasil.

Las misiones comandadas por los jesuitas se repetían en la distribución de sus distintos sectores de trabajo y religión, se urbanizaban alrededor de una plaza de gran tamaño, hacia uno de los laterales estaba la iglesia, residencia de los padres, muy cerca el colegio, y en otro sector aledaño, los talleres y la casa de las viudas, llamada Coty Guazú. Sobre el lateral opuesto, se ubicaban las viviendas de los aborígenes y otras estructuras.

Reducción de San Ignacio Miní, las mejores conservadas de la Argentina

En la población de San Ignacio se encuentra la más transcendental de lo que resta de estas reliquias que es la de San Ignacio Mini, que es uno de los puntos más importantes en atracción turística de la provincia, luego de las Cataratas del Iguazú. Este complejo es parte del patrimonio mundial de la humanidad desde 1984, luego de la gestión realizada por las autoridades argentinas y brasileñas para este reconocimiento. Del lado de Brasil existe quizás la mayor y mejor conservada de esta traza: Santa María de las Misiones, que representa un valor universal de real valía.

Podemos decir que las misiones jesuíticas fueron parte de un extenso sistema religioso, político y económico con un gran aporte a la cultura en los siglos XVII y XVIII y dejaron como legado lo que resta de esos edificios ya en deterioro.

Argentina: Misiones, magia y natura

Ese conjunto arquitectónico nos marca un ciclo revelador de la historia argentina y brasileña permanece como fiel reflejo testimonial del esfuerzo evangelizador de los jesuitas en América del Sur.

Este único sistema definió relaciones económicas, sociales y culturales en 30 asentamientos -también conocidos como reducciones-, que incluyó ranchos, plantaciones de té y yerba mate, vías fluviales y senderos que se extendieron a lo largo del Rio Uruguay y sus afluentes.

Recorre las Misiones Jesuíticas Guarani - Camino de los Jesuitas

Las reducciones tuvieron un modelo especifico comprendido por estructuras más pequeñas y construcciones delineadas para dar apoyo a distintas funciones de estos asentamientos. Esto derivó en una complicada trama de pueblos urbanos muy característicos sitos en el nordeste argentino, sur de Brasil y Paraguay.

Esta coyuntura formó parte de un contexto cultural comandado por la Compañía de Jesús, y cada uno de los sitios poseía peculiaridades productivas diferentes, así como especialidades en las propuestas arquitectónicas, urbanísticas, geográficas y funcionales.

Misiones jesuíticas en América - Wikipedia, la enciclopedia libre

Quedó como algo excepcional el trabajo de los padres representantes de la Compañía de Jesús y la mano de obra indígena, que se exteriorizaron con excelentes expresiones arquitectónicas, tecnológicas y artísticas mestizas, en las que se refleja un estilo extravagante y barroco con estilo propio.

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Alberto Antonio Curia es Periodista y Consultor Turístico

Consultorturisticorio@hotmail