La región de las tres fronteras y su riqueza natural nos proporciona a diario nuevas sensaciones y nos invita a conocerla. Es por eso que es importante la cantidad de turistas extranjeros que visitan este punto de la Mesopotamia argentina a los efectos de estar en contacto con la selva nativa.
Para ello, hoy le informamos a nuestros lectores un área protegida de importancia en esta latitud: el Parque Provincial Puerto Península, situado cerca de la ciudad de Puerto Iguazú, en el departamento Iguazú.
Este parque fue creado sobre una superficie de casi 7000 hectáreas mediante una ley provincial, en mayo de 2004.
El área corresponde a la ecorregión selva paranaense que nace en el arroyo Mboay, que también es parte de esta protección.
Cuando las autoridades decidieron su creación, se tomó conciencia de que era necesaria la preservación de estas especies arbóreas que poseen un gran valor ambiental, no solo por sus características, sino también por su ubicación que es lindante al área del parque, lo que favorece la protección general de la zona.
Aquí puede observarse en particular el resguardo de lo que llaman la selva mixta de palmitos y palo rosa. Son parte de los valores culturales auténticos provenientes de las comunidades guaraníes, que son parte de la historia de los primitivos colonos, los que hacen más valorable su resguardo.
Es muy común observar en cantidades apreciables la planta conocida como clavel del aire y dentro del relevamiento realizado por los especialistas se encontraron el palmito y el Urunday-Pará, especies no encontradas en otros lugares de Argentina
Dentro de los llamados niveles intermedios y bajos del bosque existen variedades de bromelias y orquídeas y también se hallan plantas trepadoras.
La diversidad de fauna no es muy diferente a los distintos escenarios naturales de la región. Este parque es el hábitat de muchas especies sobre las que no existe gran preocupación de amenazas del hombre. Aquí se registraron familias del osos hormigueros, mulitas grandes, gatos onza chico, tapires, pecaríes labiados, Corzuelas Pardas y lo destacable es que los yaguaretés eligieron este entorno como sitio de procreación y alumbramiento; hay ejemplares que suelen ser avistados en horario nocturno desplazándose en total libertad.
Las aves están representadas por muchas variedades, entre ellas, el picaflor copetón junto al corona violeta y amarilla. También se observan tucán grande y pico verde, martín pescador mediano y grande, pájaro carpintero garganta estriada, arco iris y cuello canela. Además se avistaron grandes cantidades de especies de aves cantoras de unas 15 familias diferentes, entre las que se destacan las variedades brasita de fuego, frutero overo y varias más.
La biodiversidad en estado puro está representada en los parques nacionales de esta región. Teniendo en cuenta que las personas dependemos para la supervivencia de nuestra especie de la biodiversidad, esta nos aporta servicios y productos que amortiguan el cambio climático.
Cuanto más cuidemos la naturaleza, mejor será nuestro castigado planeta.
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Alberto Antonio Curia es Periodista y Consultor Turístico