Un argentino en París: El Observatorio de París

La cabeza en las estrellas. Por Jorge Forbes, desde Francia, especial para DiariodeCultura.com.ar.

Instalado en el corazón de la capital francesa, desde hace más de 3 siglos, el Observatorio Astronómico de París es una «ciudadela de ciencias», que en su momento pudo descubrir Neptuno y realizar la invención del reloj parlante.

Hoy, recibe en su seno a científicos que participan en importantes proyectos astronómicos y en misiones espaciales.

Índices Indice Onomástico Indice Cronológico Indice Geográfico Indice Bibliográfico Indice Tipológico Indice Palabras Clave Siguiente Anterior Inicio Imprimir Observatorio de París 1667 - 1669 PERRAULT, Claude París Enlaces Autor Bibliografía OBRA [05 ...

Fue construido en 1847, en el techo del Observatorio de París. La cúpula Arago pone a resguardo una lente de 9 metros de largo que servía, en otro tiempo, para estudiar los astros.

Es difícil, para el profano, adivinar para qué fue creado ese edificio de piedra arenosa desde la gran reja de hierro forjado que prohíbe el acceso. Monolítico pero elegante, realizado en una arquitectura muy clásica en 1667 parecido a un «petit» château.

Observatorio de Meudon – Ricardo Hueso – Fotoblog

En la corte reina una estatua de color verde por el tiempo, que representa a un personaje de porte altanero. Se trata de Urbain Le Verrier, el astrónomo que descubrió en ese lugar, a mediados del siglo XIX, el planeta Neptuno, antes de elaborar la meteorología moderna.

Sean bienvenidos a la parte histórica del Observatorio de París-PSL (por París Science & Lettres) un vasto complejo científico erigido en el distrito 14 de París. Se comunica con la avenida del Obsevatoire, una amplia arteria con muchos espacios verdes y poco conocida por los parisienses los cuales no parecen integrarlo a su cultura. Posee normas estrictas de recepción y el lugar esta cerrado al público desde hace algunos años.

Ilustración de Antigua Ilustración De Descubrimientos Científicos Observatorio De París y más Vectores Libres de Derechos de Astronomía - iStock

En el largo pasillo del hall de entrada los volúmenes son amplios y las bovedillas majestuosas. Louis XIV, el iniciador del proyecto, tuvo la voluntad de crear un muy bello monumento a imagen, por ejemplo, del hotel des Invalides o de la Pitié-Salpêtrière, nos explica su guía, Nicolás Lesté-Lasserre, un estudioso de la astronomía. Allí, se instalaron sabios cuya misión fue la de cartografiar todo el territorio para favorecer los intercambios comerciales.

Nicolas Lesté-Lasserre - Chargé de médiation scientifique et de communication - Observatoire de Paris | LinkedIn

  • Nicolás Lesté-Lasserre

Meridiano cero, medallones de Arago, Paris, Barcelona - Naukas

  • Meridiano cero, medallones de Arago, París

Fue concebido por el arquitecto Claude Perrault, inspirado en las columnas del Louvre.

El edificio original está conectado por una escalera monumental, que se extiende en bóvedas hasta los pisos. En el primero, el parquet cruje cuando se penetra en la Gran Galería, que alberga el museo del Observatoire. Este, desborda de reliquias, testimonio de los grandes avances en materia de astronomía. Allí, se encuentran los primeros telescopios modernos, la carta del cielo austral establecida en 1755 para representar las constelaciones visibles desde el hemisferio Sur y, también, el atlas fotográfico de la Luna, realizado a fines del siglo XIX.

El Observatorio de París (II) - Otros mundos

El segundo piso lleva a la sala Cassini que, durante mucho tiempo, fue consagrada a las observaciones telescópicas. Una larga varilla de latón, sellada en el suelo la recorre sobre 32 metros, simboliza el eje alrededor del cual fue construido, de manera simétrica. Sobre todo materializa el meridiano de París, línea imaginaria que atraviesa la capital uniendo los polos Norte y Sur.

Antes de 1884, fecha de su remplazo por el meridiano de Greenwich, esa referencia fue utilizada por muchos viajeros y navegantes. Aún se utiliza para elaborar las cartas topográficas de Francia. Además, una perforación en uno de sus muros, refleja los rayos del sol y dibujan una mancha luminosa que se desplaza y acaricia la varilla de latón en el mediodía del tiempo solar.

El Observatorio de París

Estamos en el interior de un gigantesco reloj de sol!. «Estos lugares, al mismo tiempo, recibieron al gran científico León Foucault que hizo oscilar, en 1851, su célebre péndulo destinado a poner en evidencia la rotación de la Tierra sobre sí misma»… nos relata Nicolás Lesté-Lasserre, antes de llevarnos bien arriba, al techo.

El Observatorio de París (II) - Otros mundos

Allí, se erige una inmensa cúpula en chapa de cobre, que data de 1847. En el interior, una lente monumental de 9 metros de largo permitía, haciendo girar el domo sobre su eje gracias a un motor, escrutar planetas, satélites y otros asteroides.

Las observaciones aparecen complicadas debido a la polución luminosa. Al salir del bulbo blanco un detalle atrae la atención: un cámara chica con un gran angular, instalada en el borde del techo. «Acoplada a un centenar de otras, repartidas en el territorio francés, vigila de manera continua el cielo, para controlar y acorralar los meteoros», afirma Nicolás Leste-Lasserre.

El Observatorio de París

Alrededor del parque de 2,5 hectáreas que rodean los edificios originales se erigen otros, de los años 1970 que rodean con sus grises las fachadas en los cuales están el  un centro de investigación en astronomía y astrofísica, lo mejor a nivel mundial; justo detrás del de Harvard, en Estados Unidos.

Entre sus muros se activan 350 científicos, con cantidad de combinaciones, algunos de ellos trabajan en lugares reducidos en una sala blanca totalmente preservada de partículas exteriores en la puesta a punto de microscópicos captores, destinados a detectar la presencia de agua en el medio interestelar.

El Observatorio de París (I) - Otros mundos

En 2021, fue otro el equipo que apoyó a la NASA, en la misión «Mars 2020» al participar en la concepción de una cámara laser integrada a un mini robot de exploración que desde febrero pasado recorre el Planeta Rojo.

En el resto del edificio los pasillos desembocan en oficinas, laboratorios y talleres de todo tipo. Una de esas piezas contiene estanterías en las cuales desbordan aparatos electrónicos.

«Es acá en donde «fabricamos» y difundimos el tiempo legal en toda Francia», se entusiasma Michel Abgrall, ingeniero de investigación del CNRS. «Somos los guardianes y hacemos valer esa precisión extrema ya que proveemos a la Defense, a los sistemas de navegación GPS, a las redes de telecomunicación y de transporte del tipo SNCF (ferrocarril francés) e incluso a la iluminación urbana».

Para ello, hay cables que unen la sala de explotación del tiempo con el subsuelo acondicionado a la manera de bunker militar, en donde están los relojes pilotos atómicos. Estos, toman su ventaja de las vibraciones del átomo de cesio para desgranar los segundos en una serie de 16 cifras, después de la coma. Esas apreciadas medidas hacen la felicidad de una institución francesa instalada allí. Se trata del reloj parlante y su famoso «cuarto top».

El Observatorio de París (II) - Otros mundos

La primera versión fue concebida en 1933, por iniciativa del director del Observatorio, cansado de ser molestado por desconocidos que por teléfono, le pedían la hora. Fabricado, en esa época, con bobinas de cine hablado, está expuesto en una sala especial de los edificios históricos.

Simboliza que, en esos lugares, el presente siempre se reúne con el pasado…

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*Jorge Forbes es un periodista argentino que reside en Francia y que desde 1982 fue corresponsal en París para diferentes medios, tanto en la Argentina (Radio Continental), como de Estados Unidos (Voice of América), México (Radio Noticias) y Uruguay (Radio Sarandí).

Actualmente colabora con Diario de Cultura y con Arte y Colección y propone visitas en la capital francesa (privadas o en grupo, no más de 4 personas) por lugares donde vivieron argentinos famosos y conocidos, así como sitios poco conocidos para turistas, incluso aguerridos en la materia. Se recomienda hacer el pedido por email a [email protected] o al teléfono celular en Francia: 00 336 0683 7915.

También puede visitarse su pagina web: www.jorgeforbes.com.ar