La Comisión de Transportes que preside el diputado, Jorge Rizzotti (UCR), analizó el proyecto de alcohol cero al volante con invitados que respaldaron la iniciativa.
Los proyectos presentados tienen como objetivo prohibir a nivel nacional la conducción de vehículos después de ingerir cualquier bebida alcohólica.
El director ejecutivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, Pablo Martínez Carignano manifestó que la seguridad vial es una “cuestión central de salud pública”. “Nada mata más jóvenes en la Argentina que la inseguridad vial. Según datos nacionales e internacionales el alcohol está presente en al menos 1 de cada 4 siniestros viales que terminan con muertos”.
“Los principales afectados son los jóvenes entre 15 y 35 años, representan 4 de cada 10 muertos, estamos haciéndonos como país un daño irreparable, estamos perdiendo al grupo de jóvenes que tienen mucho para darnos por el alcohol al volante”, aseveró.
Sobre la afirmación “pequeñas cantidades de alcohol no hacen nada”, el funcionario explicó que es “algo viejo y ha quedado perimido. La OMS dice que con la primera copa de alcohol ya empieza la afectación a nuestra capacidad y que con una graduación entre 0.1 y 0.5 es tres veces más alto el riesgo de provocar un siniestro vial que un conductor sobrio”.
“Es necesario que Argentina deje atrás una norma vieja y tengamos una norma que va a salvar miles de vidas jóvenes”. Y luego explicó como en provincias y países de la región donde existe esta ley “ha traído aparejado una reducción notable a la siniestralidad asociada al alcohol”, manifestó Carignano al cierre de su exposición.
Desde la asociación Madres del Dolor, Viviam Perrone, también integrante del Observatorio de Víctimas de la Cámara de Diputados, expresó agradecimiento porque “estos proyectos que elaboraron los necesitamos de manera urgente y permiten el debate”. “Hoy en Argentina se pierden entre 14 y 20 personas por día en hechos viales”, alertó.
“Cuando hablamos de la ley de alcohol cero no estamos hablando de una ley seca no estamos diciendo que nadie puede tomar alcohol, lo que estamos diciendo es que toda persona que salga a cenar y le guste tomar una copa está perfecto, lo que no puede es salir después a conducir”, agregó.
Asimismo, Perrone consideró que “no solamente es alcohol cero sino que se necesita educación vial y controles. No sirve de nada esta ley si no hay controles después. Se tiene que hacer carne en cada uno no conducir cuando se toma”. “La primera causa de muerte en jóvenes en la Argentina no es la droga, no es el hambre ni la delincuencia, que son todos temas importantes, sino el motivo por el que pierden sus vidas es por hechos viales y son los más fáciles de evitar”, aseveró.