En la búsqueda de alimentos para sostener una dieta balanceada, una muy buena opción a incorporar es el tamarindo, un fruto tropical que tiene más potasio que la banana, más fibra que el kiwi y ayuda a eliminar la retención de líquidos. Proveniente del árbol que lleva su mismo nombre, la pulpa pegajosa y ácida que rodea las semillas se utiliza para hacer bebidas, dulces, salsas y condimentos.
Según Science Direct, el tamarindo proviene de un árbol homónimo que crece en Asia, África y Latinoamérica, especialmente en México y Costa Rica. Contiene aproximadamente un 55% de pulpa, un 34% de semillas y un 11% de cáscara y fibra. Además de su uso en preparaciones gastronómicas, también se utiliza en otras industrias como la farmacéutica, la textil y la de biocombustibles, entre otras.
Su sabor es agridulce, aunque se vuelve más dulce a medida que la fruta madura. La pulpa fibrosa rica en nutrientes puede tener efectos antioxidantes, antifúngicos, antibacterianos y antivirales, entre otros beneficios. Además, es conocido por ser una de las seis frutas que ayudan a combatir el hígado graso.
Beneficios de comer tamarindo
Los beneficios para la salud del tamarindo incluyen ayudar a combatir la retención de líquidos, mejorar la digestión, expulsar el colesterol malo y promover la salud del corazón. Según los Institutos Nacionales de Salud (NLM), es una fuente ideal de todos los aminoácidos esenciales, excepto el triptófano, y sus semillas pueden utilizarse como fuente de proteínas, lo que contribuye al desarrollo de músculos fuertes. A continuación, se enumeran sus propiedades:
- Una fuente de antioxidantes: la pulpa es rica en fitonutrientes que actúan como potentes antioxidantes, lo que ayuda a reducir el impacto inflamatorio del estrés oxidativo y mejora las defensas inmunitarias naturales del cuerpo.
- Propiedades anticancerígenas: estudios en animales han demostrado que el extracto de semilla de tamarindo puede reducir los marcadores de estrés oxidativo y retrasar el progreso del carcinoma de células renales, gracias a su efecto antioxidante y sus propiedades de bloqueo de las vías de señales relacionadas con el cáncer.
- Mejora la salud del corazón y el colesterol: rico en polifenoles y flavonoides, puede disminuir el colesterol LDL y aumentar el colesterol HDL, lo que reduce el riesgo de aterosclerosis. Además, la pulpa seca de tamarindo tiene efectos antihipertensivos, por lo que impulsa una reducción en la presión arterial diastólica.
- Beneficios protectores del hígado: el extracto contiene antioxidantes llamados procianidinas, que contrarrestan el daño de los radicales libres en el hígado y proporcionan un efecto protector contra la enfermedad del hígado graso.
- Propiedades antimicrobianas naturales: los compuestos naturales presentes en el extracto pueden utilizarse como antimicrobianos naturales contra microorganismos patógenos, gracias a compuestos como el lupeol, que tiene propiedades antibacterianas.
- Efectos antidiabéticos: el efecto antiinflamatorio del extracto de semilla de tamarindo puede ofrecer beneficios protectores y mejorar la regulación del azúcar en sangre en personas con diabetes, lo que lo convierte en una opción interesante para aquellos que buscan controlar su glucosa.
Valor nutricional del tamarindo
Según el Departamento de Agricultura de EE. UU., una sola taza (120 gramos) de pulpa de tamarindo contiene una impresionante cantidad de nutrientes:
- Magnesio: 92mg
- Potasio: 628mg
- Hierro: 2.8mg
- Calcio: 74mg
- Fósforo: 113mg
- Cobre: 0.086mg
Además, es una excelente fuente de otras vitaminas y minerales, como la vitamina C, vitamina K, vitamina B6 (piridoxina), folato, vitamina B5 (ácido pantoténico) y selenio. Con 3 gramos de proteína por taza, también es una gran fuente de estos nutrientes esenciales. A pesar de su contenido calórico de 287 calorías por taza, es una excelente opción para aquellos que buscan aumentar su ingesta de potasio y fibra.
El tamarindo contiene 628 mg de potasio por taza, lo que lo convierte en una opción aún mejor que la banana, que tiene 326 mg de potasio por unidad. Además, también supera al kiwi en contenido de fibra, con 6 gramos por taza en comparación con los 3 gramos del kiwi.
Fuente: La Nación.