El Premio Nobel de Medicina 2023 fue para Katalyn Karikó y Drew Weissman por la vacuna de ARN mensajero contra la Covid

El comité de los Premios destacó el trabajo de la bioquímica húngara y el investigador estadounidense para acabar con la pandemia de SARS-CoV-2.

La bioquímica húngara Katalin Karikó y el investigador estadounidense Drew Weissman ganaron el Premio Nobel de Medicina por sus descubrimientos sobre el ARN mensajero que abrieron la vía para el desarrollo las vacunas contra el Covid-19.

De acuerdo con el Instituto Karolinska de Estocolmo, que entrega el prestigioso galardón cada año, Karikó y Weissman reciben el premio «por sus descubrimientos sobre modificaciones de bases de nucleósidos que permitieron el desarrollo de vacunas eficaces contra la COVID-19».

El instituto señala que los descubrimientos de la científica húngara y el investigador estadounidense lograron «fueron fundamentales para desarrollar vacunas de ARNm eficaces contra la COVID-19 durante la pandemia que comenzó a principios de 2020».

También anota que a través de estos descubrimientos innovadores, que han cambiado fundamentalmente «la comprensión de cómo interactúa el ARNm con nuestro sistema inmunológico», Karikó y Weissman contribuyeron de una forma sin precedentes al «desarrollo de vacunas durante una de las mayores amenazas a la salud humana en los tiempos modernos».

Karikó, quien nació en Hungría en 1955, ha sido una de las científicas pioneras en la investigación del ARNm para el desarrollo de vacunas.

Ella es vicepresidenta de la farmaceutica BioNTech que desarolló junto a la empresa Pfizer, una de las principales vacunas que se utilizó para luchar contra la pandemia del covid-19.

Karikó trabajó de la mano de Weissman, quien actualmente es académico de la Universidad de Pennsylvania.

Drew Weissman y Katalin Karikó, Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en Biología y Biomedicina.

El Nobel de Medicina recayó en 2022 en el sueco Svante Pääbo, premiado por sus descubrimientos sobre el genoma de homínidos extinguidos y la evolución humana. A continuación se anunciarán mañana martes el premio de Física y, al día siguiente, el de Química, ambos otorgados por la Real Academia Sueca de las Ciencias. 

El año pasado, el galardón de Física fue para los investigadores Carolyn R. Bertozzi, Morten Meldal y K. Barry Sharpless por sus contribuciones para crear nuevas moléculas, con avances como la ‘química bioortogonal’ y la ‘química clic’.

En cuanto al de Química, fue para Alain Aspect, John F. Clauser y Anton Zeilinger por sus aportaciones a la ciencia de la mecánica cuántica, al «manipular y manejar los estados cuánticos entrelazados, en los que dos partículas se comportan como una sola unidad incluso cuando están separadas».

La Academia Sueca revelará el jueves el ganador en Literatura, y cerrará la semana con el de la Paz. El Nobel de Economía, instituido en 1968 por el Banco de Suecia, cerrará la ronda de ganadores el día 9.

Todos los premios siguen un proceso de selección parecido: científicos, académicos o profesores universitarios nominan a sus candidatos y los distintos comités Nobel establecen varias cribas hasta elegir al ganador o ganadores, hasta tres por categoría. Y tienen la misma dotación económica, este año de 11 millones de coronas suecas (947.000 euros).

Los Nobel se entregan en una doble ceremonia el 10 de diciembre, aniversario de la muerte de su creador, en Estocolmo, con excepción del de la Paz que se entrega en Oslo por decisión del fundador de los premios, el magnate sueco Alfred Nobel (1833-1896). El motivo es que Noruega formaba parte por entonces del Reino de Suecia.