Unas 130 delegaciones, incluyendo 50 jefes de Estado y 10 monarcas en ejercicio, asistieron a la misa funeral del Papa Francisco, que tuvoá lugar en la Plaza San Pedro. La ceremonia comenzó frente a la Basílica de San Pedro y culminó con el traslado del féretro del Pontífice a la Iglesia Santa María de la Mayor para su inhumación, un sitio cargado de simbolismo para su pontificado y estrechamente ligado a su profunda devoción por la Virgen María. El cortejo fúnebre que acompañó el cuerpo del Papa se realizó a paso de hombre para permitir el saludo de la multitud. Muestra de su apuesta por los más necesitados, un grupo de pobres lo esperó en las escalinatas de la Iglesia.
Quiénes asistieron a la ceremonia
Participaron del rito miembros de la Iglesia, líderes mundiales, entre los que se distinguen jefes de Estado y monarcas en ejercicio, y también los 300.000 fieles que se espera que se congreguen en la Plaza San Pedro
El féretro
Tal como indicó Francisco y rompiendo con la tradición, no fuie enterrado en tres ataúdes, sino que siguiendo la línea de la sencillez que lo caracterizó, fue sepultado en un féretro de madera
El traslado del cuerpo
La procesión fúnebre, que duró poco menos de cinco kilómetros, escoltó a paso de hombre el féretro desde la Plaza San Pedro hasta la Iglesia Santa María la Mayor
Dónde pidió ser sepultado


Hubo una transmisión televisiva en directo que se detuvo en la entrada de la basílica mariana, dado que el entierro fue un evento privado.