Hallaron un planeta errante que crece a ritmo récord

Los astrónomos lo observaron en una etapa de crecimiento normal y en un período glotón. Ahora, tiene una masa de hasta 10 veces la de Júpiter y llegó a brillar casi dos veces más que lo usual.

El planeta errante –de los que no orbitan alrededor de una estrella– Cha 1170-7626 rompió el récord de la tasa de crecimiento más rápida: absorbe 6 mil millones de toneladas métricas de gas y polvo estelar por segundo. Los astrónomos encuentran en él pistas sobre cómo nacen estos planetas y aseguran que estos cuerpos celestes no difieren tanto de las estrellas.

«Representa la tasa de crecimiento más fuerte de un objeto de masa planetaria medida. La única medición comparable hasta donde sabemos es la de OTS 44 (un objeto de masa planetaria de la constelación El Camaleón), que es dos órdenes de magnitud menor (es decir, es cien veces menor)», explicaron en el artículo.

El planeta fue descubierto hace casi 20 años en el hemisferio sur de la constelación El Camaleón. Se estima que tiene entre 5 y 10 veces más masa que Júpiter y, según el astrónomo Victor Almedros-Abad, del Observatorio Astronómico de Palermo en Italia, quien dirigió la investigación, estaba acumulando peso al absorber el gas y el polvo de un disco planetario cercano.

«Como una estrella»

El estudio publicado en la revista científica IOP Astrophysical Journal Letters fue dirigido por Almendros-Abad y participaron astrónomos de distintos países. La investigación se centró en la evolución de los planetas errantes que podrían haberse formado cerca de las estrellas principales como planetas regulares y que luego volaron lejos o que pudieron haberse formado de forma aislada, tal como lo hacen las estrellas.

Según la publicación, algunos de estos planetas pueden compartir un camino de formación similar al de las estrellas. Los estallidos de crecimiento como el que tuvo el Cha 1170-7626 «son eventos clave en la evolución temprana de las estrellas. En particular, tales eventos pueden tener un efecto significativo en la evolución química y física del disco y potencialmente en las primeras etapas de la formación de planetas», puntualizaron en el artículo.

Fuente: Página12