Es tendencia indiscutida en Tik Tok. La “mental health walk”, es decir la caminata para la salud mental, conocida también como ”la hot girk walk” es furor en esta red entre los jóvenes. Si bien el nombre hace alusión a las mujeres, no significa que sea exclusiva para el sexo femenino. Todo lo contrario, en TikTok se fomenta que lo hagan personas de cualquier género y edad.
Su creadora, Mia Lind publica regularmente videos sobre el tema donde sugiere caminar unos seis kilómetros diarios mientras se escucha música animada y se piensa en las metas, logros y/o en lo que cada uno quiere agradecer.
La popularidad es tal que, en la actualidad, el hashtag #hotgirlwalk tiene más de 458 millones de visitas. Y si bien la idea de hacer esta caminata es divertida, es más beneficiosa de lo que se piensa.
“Se sabe que la actividad física además de prevenir y disminuir el riesgo de cualquier enfermedad también tiene un aporte muy positivo en lo que tiene que ver con la salud mental. Cualquier actividad física hace que el cerebro libere neurotransmisores como la serotonina y la dopamina y estos permiten que tengamos sensaciones placenteras”, dice la psicóloga, Sol Buscio (M.N. 71610).
De ser una tendencia en redes a convertirse en un indispensable
“Yendo a hacer una estúpida caminata por mi estúpida salud mental”, escribe la usuaria de TikTok @ninalaevski en un video suyo caminando cómicamente sobre la nieve que tiene casi un millón de “likes” y fue compartido más de 100 mil veces.
Algo que destacan los profesionales de la salud mental es que esta tendencia sirve para crear concientización sobre las distintas problemáticas psicológicas y ayuda a que las personas puedan ser sinceras sobre cómo se sienten en verdad.
@ninalaevski So true🤑 #stupidwalkchallenge ♬ оригинальный звук – _malifisenta007_
“Nuestros cuerpos están diseñados para moverse, y cuando no lo hacemos, la energía reprimida se queda en el interior y crea más estrés”, dice Jonathan Hoban, pionero de la terapia de caminar y autor de Walk With Your Wolf: Reconnect with your Intuition, Confidence and Power.
“Tenemos una necesidad primaria y fundamental de caminar, al menos 40 minutos por día si es posible. El tiempo para caminar ayuda a revitalizar el cerebro, calmar los niveles de adrenalina y crear una sensación de claridad. Es por eso que cuando se regresa de una caminata, normalmente se tiene la respuesta a cualquier problema que angustia”, dice Hoban en su libro.
Además de ser demostrado en redes sociales y avalado por profesionales de la salud mental, esta actividad fue llevada al campo científico. En particular, un estudio publicado en el Journal of Medical Medicine evaluó el impacto de la caminata al aire libre en personas con ansiedad y depresión. Los investigadores a cargo llegaron a la conclusión de que caminar por estos ambientes mejoraba de manera efectiva el estado psicológico de los pacientes depresivos y ansiosos.
Para la psicóloga Mariana Kerestezachi (M.P. 95325) emprender este ejercicio diariamente ayuda a tener la atención en el aquí y ahora, a estar atento a todo lo que pasa alrededor. Detalla, también algunos beneficios:
Aumenta la autoestima personal y el buen humor.
Mejora el orden de la rutina y la disciplina al tener que comprometerse a ejercitar con horarios fijos.
Ayuda a entrenar las emociones y a tolerar mejor la frustración.
¿Cuánto tiempo hay que caminar?
“A mis pacientes les recomiendo que empiecen con las caminatas de menos a más. Ir haciéndola de manera progresiva hasta alcanzar los objetivos que se hayan propuesto. Desde el lado terapéutico sirve para reforzar el esfuerzo en el paciente y para ponderar si pueden alcanzar lo que se proponen o no, pensar ‘¿por qué pasa eso?’”, añade Buscio.
Para la psicóloga también es beneficioso hacerlo mientras se escucha música, aprovechar para hacer meditaciones guiadas, o practicar el ejercicio de la atención plena. Por otro lado, destaca que el paseo con las mascotas tiene un aporte muy positivo en la salud mental, “hay estudios que demuestran que incorporarlos en la caminata diaria ayuda a sentirse acompañado y a estar mejor”.
Por último, Buscio reflexiona: “no tiene que ver tanto con la actividad en sí sino con todo lo que te aporta al hacerla. Mientras te genere placer, disfrute y no la hagas por obligación o solo por fines estéticos, se va a notar el impacto positivo en el bienestar. Los pacientes a los que les recomiendo esto, empiezan a experimentar sensaciones placenteras como la seguridad, la autoconfianza y se dan cuenta de que tienen la capacidad de lograr lo que se proponen”.
Fuente:_ Victoria Vera Ziccardi, La Nación