WhatsApp estrena nueva función de «Estado Secreto” que pone en jaque a los infieles

Las nuevas funciones de WhatsApp permiten ver toda la información de la cuenta del usuario y compartir estados secretos

WhatsApp se ha convertido en la red social de mensajería instantánea que es furor en el mundo, prueba de esto es el hecho de que cada vez más personas la utilizan por su buen funcionamiento y por que es una aplicación que constantemente mejora sus funciones. En la última semana, la aplicación reveló la implementación de una nueva actualización llamada ‘Estado secreto’ que ya está disponible para dispositivos iOS y Android. ¿Cuál es el objetivo de esta nueva función? Lograr que cualquier persona comparta una imagen, video o texto a un grupo selecto de sus contactos en vez de a todos los agendados -que es lo que ocurría en la aplicación hasta el momento-. De esta manera, aquello que el usuario compartió permanecerá en su estado durante las próximas 24 horas y solo podrá ser visto por las personas que eligió. Sumado a esta novedad, la plataforma de mensajería añadió una opción para poder visualizar y llevar un registro de todas las acciones que se han hecho en la aplicación: cuántos mensajes y llamadas se han enviado y recibido, cuántos estados se han publicado, el número de contactos bloqueados, los grupos en los que está incluido y los usuarios frecuentes con los que conversa el usuario.

Este reajuste en el servicio de la aplicación abre la polémica sobre la privacidad de los usuarios, puesto que cualquier persona que tenga acceso a ese celular podrá visualizar toda la información de esa cuenta de WhatsApp. Así, por ejemplo, en el caso de una pareja que sospecha de una infidelidad por parte del otro, puede fijarse si este le compartió estados secretos a terceros y excluyó a su pareja o si se mensajea con un tercero frecuentemente y ese chat está oculto o es borrado para evitar sospechas.

Sin embargo, presuntos comportamientos que uno piensa que podrían ser infidelidad como pasa con los mensajes de texto, fotos, llamadas o videos a terceros, están clasificados dentro del neologismo llamado “microinfidelidades” o “microcheating” en inglés. Este término fue creado por la psicóloga australiana Melanie Schilling, quien explicó en su momento a The Daily Mail que la palabra surgió por la necesidad de denominar un comportamiento entre las parejas que hasta el momento no tenía nombre, pero que era una realidad inminente.

Asimismo, Schilling describió a las microinfidelidades como aquellas acciones mínimas, o pequeños comportamientos, en los que una persona que está comprometida lesiona la relación traicionando al otro, valiéndose del coqueteo encubierto.

Ahora en WhatsApp se podrá hacer uso de estados privados para que un grupo selecto de personas visualicen imágenes, videos o texto
Ahora en WhatsApp se podrá hacer uso de estados privados para que un grupo selecto de personas visualicen imágenes, videos o texto

Cuanto más WhatsApp, mayor riesgo de microinfidelidad

“Estamos hablando de algo que lamentablemente aparece y aumenta con la llegada de las nuevas tecnologías y formas de comunicación que hacen más viable estas conductas”, dice la psicóloga y sexóloga Sandra López (M.P. 61148).

¿Qué es lo que diferencia la infidelidad de la microinfidelidad? Según López, en las parejas puramente monógamas y cerradas hay un acuerdo/límite respecto a relacionarse con otras personas de manera emocional o sexual y en las microinfidelidades se cruza una línea de intimidad, pero no se llega a concretar específicamente el encuentro físico con la otra persona. “No se concreta el encuentro sexual ni emocional, pero sí hay una comunicación”, aclara.

Es una forma de deslealtad en la que caen las personas comprometidas, solo que a diferencia de los tipos de infidelidad más recurrentes, estas ocurren de una manera tenue y con ayuda de la tecnología. Pero, ¡atención! porque si bien el nombre microinfidelidad apareció hace pocos años, las acciones de las que se hablan existen desde hace mucho tiempo.

Nichi Hodgson, autora de un libro sobre citas llamado The Curious History of Dating: From Jane Austen to Tinder, está de acuerdo en que elmicrocheating le da nombre a algo que ya existía antes. “Incluso en el siglo XVIII, las personas coqueteaban con cartas inapropiadas o revelaban pensamientos indebidos en sus diarios. Lo que ha cambiado es que ahora tenemos herramientas que facilitan este micro engaño más que nunca”, dijo Hodgson al ser consultada por la BBC sobre este mismo tema.

“Es el secreto y el engaño que acompaña a la comunicación lo que la define como microinfidelidad”, dijo Schilling. “Tu pareja puede tener una relación perfectamente platónica con un amigo y ser sincero y abierto para hablar de ello. Esto no debería hacer sonar las alarmas. El problema aparece si comienza a ocultarte su relación o te miente al respecto, entonces ahí se empieza a considerar la idoneidad de su vínculo”, añadió en el reportaje original.

¿Cómo darte cuenta si tu pareja está cometiendo una microinfidelidad? Para la psicóloga López puede haber varias pautas, pero uno de los puntapiés que sirven para identificarlas son los cambios llamativos como por ejemplo: distintos horarios, inusual manejo del teléfono, actitudes que puedan levantar sospecha y empiecen a afectar el nivel de confianza de la pareja. “Es muy difícil poder construir hacia adelante si se rompe la confianza. Se produce una sensación de amenaza, de que el otro se va a ir, de que hay un engaño o traición y se despiertan ansiedades y angustias”, sostiene López.

Para los expertos, no se debe caer en estos comportamientos con demasiada frecuencia. Ocultar cosas de forma recurrente destruye la confianza de la pareja y puede tener un impacto negativo en el futuro de la relación.

Aunque no impliquen sexo, esos comportamientos pueden erosionar y precipitar el fin de la pareja porque se producen a escondidas y pueden considerarse, al igual que la infidelidad tradicional, una traición a la confianza del otro.

En las microinfidelidades se cruza una línea de intimidad, pero no se llega a concretar específicamente el encuentro físico con la otra persona
En las microinfidelidades se cruza una línea de intimidad, pero no se llega a concretar específicamente el encuentro físico con la otra personaShutterstock

Fuente: La Nación