La grieta en tiempos del primer peronismo

Ediciones Fabro acaba de publicar «Decires de Gorriti y Gascón», una nueva novela de Hugo Barcia.

La obra contiene nueve cuadernos que son, en rigor, novelas cortas entrelazadas que, a un mismo tiempo, son unitarias pero confluyen todas en un final impensado y unificador, por lo que podría afirmarse que se trata de una sola novela compartimentada en varias estaciones.

El espíritu de la obra intenta mostrar, desde un costado social y barrial, la grieta que atraviesa a la Argentina desde su albor como nación, pero esta vez desde la primera etapa peronista.

Peronistas y contreras se miran de reojo en el barrio, en ese epicentro que constituye la esquina de Gorriti y Gascón y sus alrededores. Para eso, el arma fundamental es el chisme: los decires, en rigor, los chismes, trazan también un paralelismo con las noticias falsas de la actualidad: se usan para desmoralizar, desprestigiar y derrotar al enemigo, aunque se vista de simple vecino.

El filósofo de la fonda El Renaciente, un recurrente personaje de la obra, asegura para desvirtuar los decires que “nunca ningún testigo estuvo en el lugar de los hechos” pero, al mismo tiempo, el sofista barrial sostiene que “en el barrio, es más importante lo que los vecinos opinan de los hechos, que los hechos en sí mismos”.

Hay un único cuaderno (Los malandras del Maldonado) que transcurre, en su mayor parte, a mediados de la década de 1920; el resto de los cuadernos e historias transcurren entre 1955 y 1961.

Los recursos estilísticos de la obra son variados: pintura de época, costumbrismo, sainete, el grotesco criollo, elementos de narrativa sobrenatural y hasta toques de realismo mágico.

Todos los personajes de la obra se entrecruzan en más de un cuaderno, lo que le da un toque polifónico y de variadas realidades y espesuras al relato (ningún relato cuenta una sola historia).

Decires también tiene una marcada conexión con otras dos novelas anteriores del autor: El Dragón del Sur (Ciccus Literaria) y Las sombras cardinales de Porfirio (Corregidor).

Casuística de los relatos:

1) En El mito de la eternidad, don Tenorio, un carrero peronista, jefe de un conventillo de santiagueños, se enfrenta en un duelo dialéctico con el médico contrera del barrio, el doctor Prieto. El verdadero y parroquial triunfo de don Tenorio se produce cuando el viejo carrero resucita en su propio velorio. El subtexto es: el peronismo es inmortal.

2) En La Mandrágora de Gorriti, el doctor Prieto cae rendido ante los embrujantes encantos de Perla Maldonado (la Mandrágora), su “sirvientita” peronista, y abandona a su esposa Inés, quien había emprendido una guerra equivocada contra la Beba Scchiapatosta, la ninfa de la calle Gorriti,

3) En El día que se apagó el sol, se narra la historia de Carlitos, un joven albañil catamarqueño hijo de doña Rosario. Doña Rosario muere a pocos días de ver un eclipse que ella supuso que entrañaba el fin del mundo. Carlitos lucha por conquistar a Raquel, la hija del farmacéutico contrera del barrio. Raquel sufre graves heridas en el bombardeo a la Plaza de Mayo. La barra de la esquina del buzón de Gorriti y Francisco Acuña hostiga a Carlitos aunque, por el absurdo, lo termina ayudando

4) El sombrero del albañil contiene varias historias: la de don Cándido y sus temores por la caída de Perón; el hostigamiento de la barra del buzón; la llegada de la televisión al barrio; los amores turbulentos de la Beba Scchiapatosta y el Hétor; la vuelta del ánima de don Tenorio. El sombrero metaforiza la lucha por la defensa de una vida digna de los laburantes.

5) Marina, el amor bajo los plátanos, introduce, como el cuaderno anterior, el elemento sobrenatural en el relato: Marina, hija de los dueños de la fonda de Gorriti y Gascón, lucha hasta la muerte por el amor de Jacinto, un joven carpintero que vive en uno de los tantos conventillos del barrio.

6) La estación de las cien almas transcurre a 70 km al noroeste de la provincia de Buenos Aires, en el paraje La Estación, rescatado del atraso y la miseria por el jefe de esa estación ferroviaria, don Prudencio Pereyra, un apasionado peronista. El relato tiene conexión profunda con Gorriti y Gascón. La historia paralela, y central, es la del trágico amor de Ana Ordóñez y Benito Rivera. El elemento sobrenatural también está presente en este capítulo.

7) Los malandras del Maldonado transcurre en su mayor parte en 1925, cuando aún Porfirio Gómez era propietario de un burdel a orillas del Maldonado, antes de transformarlo en una fábrica textil al conjuro del primer peronismo y del amor por su esposa polaca muerta. Los personajes centrales son los malandras Leónidas Killian y el Rengo Sorín, regenerados por el proxeneta, luego devenido industrial y peronista.

8) En La plegaria de los santos, el barrio es cercado por un supuesto problema sanitario y los vecinos no pueden salir de ese pequeño y bucólico escenario. El cura Silva, el quiosquero Manuel y el doctor Prieto, sanjando sus diferencias políticas, se unen para liberar al barrio de lo que, suponen, es un ataque represivo. El elemento sobrenatural campea en este capítulo.

9) Bordado de ángeles es el cuaderno de cierre en el que confluyen todos los personajes e historias. Todo es sobrenatural en este capítulo.

Ficha técnica y sinopsis

Título completo: Decires de Gorriti y Gascón, antología de mitos dudosos, leyendas incomprobables y chismes homologados

400 páginas.

Autor: Hugo Barcia

Ediciones Fabro – 2021