Militantes del movimiento que desde hace varias semanas se movilizan en Francia bloqueando carreteras e interrumpiendo espectáculos y encuentros deportivos como forma de denunciar la inacción climática y reclamar a los gobiernos acciones fuertes reinvindicaron esta acción en Twitter.
Una decena de militantes de Ultima renovación bloqueó el tráfico cerca del ministerio francés de Economía en París, mientras que en Toulouse otro colectivo interrumpió por unos 10 minutos un partido del torneo francés de rugby al atarse a los arcos. Momento en que dos activistas -ahora detenidas a disposición judicial- se pegaron a los marcos de las majas de Goya, en el Museo Reina Sofía de España, y pintaron en la pared «+1,5ºC» en referencia a la meta inalcanzada de calentamiento fijado por la comunidad internacional, repasó el sitio español El Debate.
«El eco-vandalismo sube un escalón», se indignó en Twitter la ministra de la Cultura, Rima Abdel Malak, que visitó el lugar para inspeccionar lo ocurrido, agradeciendo a los «restauradores que intervinieron rápidamente». «El arte y la ecología no son contradictorios. Al contrario, son causas comunes», añadió.
El grupo Última renovación forma parte de la Red A22, presente en 11 países, que aumenta las acciones espectaculares, en particular lanzando pintura sobre obras de arte desde hace varias semanas.
Just Stop Oil en Reino Unido, Ultima Generazione en Italia, Futuro vegetal en España, Dernière Rénovation o última renovación en Francia, la Red A22 financiada por el Fondo de Emergencia Climática de Aileen Getty y otros ricos de apellido ilustre como Rockefeller son algunos de los grupos ecologistas que radicalizan sus acciones exigiendo reacción de los gobierno contra el cambio climático y el calentamiento global, agregaron desde El Debate.