Escándalo en México: denuncian que obras patrimoniales de Frida Kahlo fueron robadas y vendidas en EE.UU.

La ex directora de Museo Frida Kahlo aseguró que al menos dos óleos, ocho dibujos, varias copias de dos litografías y páginas de su cuaderno personal desaparecieron para ser vendidas en subastas

La exdirectora del Museo Frida KahloHilda Trujillo Soto, ha denunciado públicamente a la administración de la Casa Azul de permitir la desaparición y posible venta ilegal de obras de Frida Kahlo, que deberían formar parte del patrimonio cultural nacional.

Entre las piezas que Trujillo Soto considera desaparecidas del acervo del Museo se encuentra un conjunto de obras que, según su denuncia, han terminado en colecciones privadas fuera de México.

De acuerdo con la información publicada por The Art NewspaperTrujillo Soto sostiene que durante sus 18 años de trabajo en la Casa Azul —primero como subdirectora entre 2002 y 2009, y luego como directora hasta 2020— detectó indicios de que varias piezas del inventario original ya no se encuentran en la colección.

Interior de La Casa Azul,Interior de La Casa Azul, el Museo Frida Kahlo ( REUTERS/Henry Romero)

En un blog personal, la exdirectora relató que el consejo directivo del museo ignoró las pruebas que ella presentó sobre la ausencia de obras, y expresó su esperanza de que su denuncia ayude a revertir la pérdida de patrimonio y a frenar los abusos de poder, devolviendo las piezas faltantes tanto a la Casa Azul como al Museo Diego Rivera Anahuacalli.

Tras la muerte de Frida Kahlo en 1954, su esposo Diego Rivera dispuso que sus bienes fueran donados al pueblo de México. Rivera dedicó sus últimos años a elaborar un inventario para el Fideicomiso de los Museos Diego Rivera Anahuacalli y Frida Kahlo Casa Azul, actualmente administrado por el Banco de México. Tanto las obras de Kahlo como las de Rivera están catalogadas como “monumentos artísticos de la nación”, lo que prohíbe su exportación sin autorización expresa del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL).

En 2011, el entonces director Carlos Phillips Olmedo encargó un estudio para comparar el inventario original de Rivera con los fondos actuales de la Casa Azul. Trujillo Soto afirmó que nunca tuvo acceso completo a los resultados de ese estudio, que Olmedo mantuvo en reserva pese a sus reiteradas solicitudes de una investigación exhaustiva. De las tres páginas que logró obtener —de un total de 200—, se desprende que faltan dos óleos, ocho dibujos y varias copias de dos litografías."Frida en llamas (Autorretrato dentro«Frida en llamas (Autorretrato dentro de un girasol)», 1953-1954 (Banco de México)

Entre las piezas más reconocidas que Trujillo Soto identifica como desaparecidas figura un cuadro de 1954 que Rivera describió como Frida en un paisaje… o Frida en llamas. Esta obra ya no se encuentra en la colección del museo, pero existe un cuadro en una colección privada conocido como Frida en un paisaje con el sol en la tierraCabello sueltoAutorretrato de un girasol, que la exdirectora asocia con la pintura extraviada.

The Art Newspaper reportó que varias de las obras catalogadas como faltantes por Trujillo Soto han pasado por la galería neoyorquina Mary-Anne Martin Fine Art. Entre ellas se encuentra el óleo de 1952 Congreso de los Pueblos por la Paz, vendido en Sotheby’s en 2020 por USD 2,66 millones, y el dibujo Libertad americana, o Boceto para un monumento irónico a la libertad yanqui, que el inventario de 2011 ya atribuía a la galería.

El sitio web de la galería actualmente no muestra obras de Kahlo en su inventario, pero la herramienta Way Back Machine indica que en diciembre de 2021 ofrecía el Autorretrato dentro de un girasol, con procedencia listada únicamente como “Colección privada, Dallas”."Congreso de los Pueblos por«Congreso de los Pueblos por la Paz» (1952). Vendida en Sotheby’s Nueva York en 2020 por 2,66 millones de dólares

Hasta el momento de la publicación de la nota, ni Mary-Anne Martin ni el Museo Frida Kahlo habían respondido a las solicitudes de información de The Art Newspaper.

Además del inventario, Trujillo Soto señaló la desaparición de al menos seis folios del diario de Frida Kahlo. El manuscrito completo fue fotografiado para una edición facsimilar en 1994, pero en 2003 el original fue retirado de exhibición y guardado en una caja fuerte.

En 2009, al abrir la caja, Trujillo Soto notó que faltaban 12 entradas (seis páginas dobles) correspondientes a marzo de 1953, en comparación con la reproducción. También manifestó sospechas sobre la posible sustracción de otras páginas, incluyendo un dibujo valorado en USD 10 millones que, según versiones, fue quemado en una fiesta como parte de un fallido lanzamiento de NFT en 2022.En 2022 un millonario quemóEn 2022 un millonario quemó un dibujo para vender la versión NFT (Foto: captura de pantalla/YouTube)

Esta obra también habría pasado por la galería de Martin, aunque la comerciante negó conocer al empresario de NFT Martin Mobarak cuando este afirmó haber destruido el original.

La historiadora del arte Helga Prignitz Poda, autora de varios libros sobre Kahlo, declaró al diario mexicano El Universal: “Estas páginas son indudablemente una gran pérdida. El diario es la fuente más importante para quien quiera estudiar la obra de Frida Kahlo”.

Prignitz Poda también reconoció estar al tanto de la desaparición de obras originalmente pertenecientes al museo. “El hecho de que la propia Casa Azul no haya cuidado mejor su colección es un escándalo”, afirmó.Algunas de las páginas delAlgunas de las páginas del diario que desaparecieron (Blog Hilda Trujillo)

El INBAL respondió a la publicación de Trujillo Soto con un comunicado en el que aseguró “no haber otorgado permisos para exportaciones permanentes de obras de estos autores [Kahlo y Rivera]”. Por su parte, el fideicomiso que administra los museos replicó que “la persona que hoy realiza estas acusaciones [Trujillo Soto] nunca presentó una denuncia formal durante su relación profesional con el fideicomiso. Por el contrario, su contrato fue rescindido tras detectarse irregularidades en su administración y por haber beneficiado a terceros con los bienes bajo su resguardo”.

Consultada por el medio, Trujillo Soto respondió: “Si beneficiar a terceros significa contratar especialistas calificados y no intentar hacerlo todo internamente, entonces sí, eso es lo que hago”. La exdirectora mantiene una demanda contra el fideicomiso por su despido en octubre de 2020, proceso que aún se encuentra en los tribunales.

El medio mexicano Excélsior publicó un artículo de opinión en el que advierte: “Con cada minuto que pasa, la desconfianza y la incertidumbre solo aumentan”, y exhorta a la presidenta Claudia Sheinbaum a intervenir si fuera necesario para esclarecer la situación.

Fuente: Infobae