Tesoros revelados: la sala secreta con bocetos de Miguel Ángel se abre al público

Descubiertos en 1975, estos valiosos dibujos ofrecen una mirada única a las obras del maestro renacentista. Los visitantes podrán presenciar la faceta menos conocida de la vida del artista

En un acontecimiento sin precedentes, la sala bajo la “Capilla del pintor” en la Sacristía Nueva de la basílica de San Lorenzo en Florencia, que alberga los bocetos de Miguel Ángel, estará abierta al público a partir del 15 de noviembre. Esta ocasión marca la primera vez en la historia que los dibujos atribuidos al maestro renacentista serán accesibles para el deleite de visitantes de todo el mundo.

Los bocetos, considerados como secretos, fueron creados por Miguel Ángel mientras se encontraba oculto en una cámara subterránea, evitando así una sentencia de muerte dictada por el Papa Clemente VII. Esta habitación, ubicada debajo de las Capillas de los Medici, es un testimonio tangible del ingenio y la creatividad que el artista desplegó en medio de adversidades.

La existencia de estos valiosos dibujos, realizados con carbón y tiza, fue descubierta en 1975 por Paolo Dal Poggetto, entonces director de las Capillas de los Medici, durante una búsqueda para expandir el espacio del museo. Una trampilla escondida bajo un armario llevó al hallazgo de una cámara de 10 metros de largo y tres de ancho, que albergaba estos tesoros olvidados.

Delicados dibujos al carboncillo que algunos expertos han atribuido a Miguel Ángel

Según la teoría de Dal Poggetto, Miguel Ángel se ocultó en el pequeño espacio “de la ira del Papa Clemente VII” por apoyar una república de corta duración que derrocó a los Médici, realizando estudios para algunos de sus proyectos. Esto incluye dibujos que se cree representan las piernas de Giuliano de ‘Medici, como se incluye en la Nueva Sacristía cerca de la entrada de la sala secreta.

En palabras de Paola D’Agostino, directora de los Museos del Bargello, quien recientemente guió a periodistas en una visita a la sala, los dibujos ofrecen una ventana al pasado, como si Miguel Ángel estuviera creando un álbum de sus obras más destacadas. La sala se usó como depósito de carbón hasta 1955, momento en que fue sellada y olvidada durante décadas bajo una trampilla oculta debajo de muebles. Los dibujos mismos se descubrieron bajo dos capas de yeso.

A partir del 15 de noviembre, hasta 100 visitantes tendrán acceso cada semana previa reserva

Algunos de los bocetos evocan figuras icónicas, como las desnudas que adornan la Capilla Sixtina, y uno incluso parece ser un homenaje a su famosa estatua de David. Otros reflejan las figuras presentes en la tumba de la familia Medici, una obra maestra del artista que se encuentra en la Sacristía Nueva, justo encima de esta cámara secreta.

Se cree que Miguel Ángel se refugió en esta sala para escapar de los Médicis, quienes en un giro inesperado de la fortuna, se convirtieron en sus perseguidores. Durante el exilio de la familia, el artista trabajó incansablemente en las fortificaciones de la ciudad, sirviendo a la causa de un gobierno republicano efímero.

El espacio fue descubierto en 1975 y provocó un feroz debate sobre la atribución de Miguel Ángel

La sentencia de muerte, impuesta por el Papa Clemente VII, miembro de la familia Medici, fue finalmente levantada para permitir a Miguel Ángel culminar su magistral labor en la Capilla Sixtina y la tumba de los Medici. Tras estos eventos, el artista partió hacia Roma en 1534, dejando tras de sí un legado imborrable.

Hasta ahora, la sala estaba reservada exclusivamente para eruditos del arte, pero a partir de ahora, se permitirá la entrada de grupos reducidos de visitantes, limitando la cantidad a cuatro personas a la vez. Esta medida tiene como fin preservar el espacio y sus preciosas reliquias para las futuras generaciones. A partir del 15 de noviembre, se permitirá el acceso a la sala a un máximo de 100 visitantes por semana mediante reserva, cuatro a la vez, con un tiempo máximo de 15 minutos dentro del espacio.

Fuente: Infobae