Xuxa, sin filtro: la reina de los bajitos reveló que con Pelé descubrió el sexo, se refirió a los rumores de romance con Marlene Mattos y contó por qué odia mirarse al espejo

En un documental sobre su vida recientemente estrenado en Brasil, la animadora infantil repasó los inicios de su carrera y brindó detalles desconocidos de su vida personal

Se estrenó en Brasil la serie que repasa la vida de la conductora infantil más exitosa de la región, Xuxa, el documental, y el primer capítulo ya dio qué hablar: la reina de los bajitos hizo un mea culpa sobre la elección de sus paquitas. Además, en una entrevista que brindó a propósito del estreno, reveló los peores momentos junto a dos de sus parejas más famosas, Pelé y Ayrton Senna, se refirió a los rumores de romance con Marlene Mattos y reveló que odia su cuerpo cuando se mira al espejo.

Muchos televidentes esperaban que en este primer capítulo de cinco, que ya está disponible en la plataforma Globoplay, Xuxa hablara sobre su infancia. Sin embargo, se encontraron siendo testigos de uno de los momentos más complejos de su vida: ya consolidada como modelo, iniciando su romance con Pelé y dando sus primeros pasos en la televisión.

Allí, la intérprete de “Ilarié” cuenta que quien la descubrió fue el director y productor Maurício Sherman. El poderoso hombre del mundo del espectáculo brasileño vio una serie de fotografías suyas y además de en su belleza física, reparó en un rasgo de su personalidad: la vio como a una niña que sobre el escenario lograba cautivar a los demás. “Ella no imitaba a los chicos, los chicos la imitaban a ella”, recordó Sherman.

Luego, el documental repasa los primeros programas conducidos por Meneghel en Rede Manchete, cuando todavía no había cultivado el perfil que la haría única: su comunicación directa y fluida con los niños. Entonces sí se enfoca sus primeros pasos en O Globo y la elección de las adolescentes que la acompañaron, las célebres “paquitas”. Fue allí cuando Xuxa reconoció que fue un error que todas las elegidas hayan sido chicas blancas y rubias.

El segundo episodio estará disponible el 20 de julio y se centrará en el éxito que la conductora tuvo en la Argentina y otros países de Iberoamérica. Además, mostrará el reencuentro de la conductora con Marcelo Ribeiro, el actor que, siendo un niño, protagonizó junto a ella el cuestionado thriller erótico Amor, Estranho Amor.

El despertar sexual y sus amores

Para promocionar el estreno del documental, del que es productora, Xuxa brindó una entrevista al podcast Quem Pode, Pod en la que no evitó ningún tema.En principio, contó le tomó un tiempo explotar su sexualidad. “Me enteré en la ducha, mientras me bañaba. Me pareció genial. Luego, perdí la virginidad cuando tenía entre 17 y 18 años. Quería dejar de ser virgen porque empecé a modelar a los 16 y las demás modelos no solo me habían puesto un apodo sino que dejaban de hablar cuando me acercaba. Llegaba a casa llorando y le decía a mi mamá que quería dejar de ser virgen. Ella me respondía: ‘¡Tranquila! Ya va a llegar el momento adecuado’. Y claramente ese no era el momento adecuado.

“Una vez, llegué a desnudarme frente a un chico y le dije: ‘¡Vamos!’. Pero él me respondió: ‘¿Sos virgen, verdad? No, mejor no’“, recordó la conductora. Y agregó: “Ya era conocida como un símbolo sexual y en realidad era virgen. Y no me resultaba agradable estar en esa posición. Además, no me conocía a mí misma. No es fácil lucir sexy en las fotografías si no sabés lo que es eso. Quería perder mi virginidad de inmediato… Y Fue raro, no fue genial. Fue en mi auto, una situación muy difícil. Después, conocí a Pelé, y todo mi descubrimiento fue con él”, reveló.

Sin embargo, reveló que el futbolista fue reacio a creerle que no tenía experiencia. “Me decía que no podía creer que no haya hecho esto o aquello. Y realmente, con él fue mi primera relación sexual, porque fue la primera vez que tuve sexo con un hombre como debe ser”, confío.

Xuxa junto a Pelé, en 1983
Xuxa junto a Pelé, en 1983RALPH GATTI – AFP

La conductora reveló, además, que el astro del fútbol tenía tres personalidades. “Hablaba en tercera persona. Tenía tres personalidades: Dico [su apodo], Edson [su nombre] y Pelé [su nombre artístico]”, señaló. Además, explicó que mientras estuvieron juntos, él mantenía otras relaciones paralelas. “Por eso él inventó eso de que teníamos una ‘amistad colorida’ y yo, con 17 años, lo repetía. Él me decía que las mujeres le coqueteaban, pero que en el momento en el que estaba teniendo sexo pensaba en mí”, recordó. Y agregó: “Tuve que aceptar la traición sin querer. No era una relación abierta. Yo no tenía derecho a hacer nada, pero él sí podía, porque era Pelé. Y como era mi primer hombre, no podía compararlo para así darme cuenta de que eso no era saludable”.

Con respecto a su romance con Ayrton Senna, que comenzó un año después de haber terminado su relación con Pelé, la conductora indicó: “Ahí fue cuando me descubrí como mujer, porque Pelé me dejó varios traumas, y Beco [Ayrton] trató de quitármelos. Cuando estaba por tener sexo con él, le dije algunas cosas y me preguntó: ‘¿Quién te dijo eso?’. Me explicó que eso no estaba bien y me propuso: ‘Empecemos de nuevo’”, explicó. “Estuvimos dos años juntos, y después de que él me dejó, nos seguimos viendo, siempre con cita previa. Pero después de que empezó a salir con Adriane Galisteu, ya no. Era muy fiel, no nos veíamos ni nada. Y luego llegó la fatalidad”, expresó, refiriéndose al accidente en el que el corredor perdió la vida, en 1994.

La artista brasileña abordó también el tema de la maternidad. En la entrevista, afirmó que su mirada del mundo cambió con el nacimiento de su hija Sasha e indicó: “Me dije que tenía que empezar a dar, a repartir; algo que nunca había hecho”. La conductora recordó, además, que en su momento creyó que Senna sería el padre de sus hijos. “Pensé que sería madre a los 25 o 26 años. En ese momento conocí a Junno Andrade -su actual esposo- pero a pesar de que coqueteaba descaradamente con él, estaba de novia. Luego conocí a Senna, pero Marlenne Mattos -su manager durante décadas- me dijo que tenía que elegir entre el trabajo y el amor. Me dijo que si él entraba por una puerta, ella salía por la otra. Y ya se sabe cuál fue mi elección. Fui una idiota”, reflexionó.

La animadora junto a Senna
La animadora junto a SennaGetty Images – HOLA

La maternidad llegaría varios años después, y el hombre elegido fue Luciano Szafir, con quien hoy mantiene una amistosa relación. Y, en cuanto a su segunda vuelta con Andrade, Xuxa reveló que fue ella quien le propuso sexo sin compromiso. “Cuando Sasha empezó a crecer y conocí a Ju, dije ‘Mirá, quiero que seas mi amigo-amante’. Pero Sasha tenía 14 años, y no podía presentarlo de esa manera. Entonces le dije ‘Vas a ser mi novio, y si no resulta, no resulta’”.

La relación tormentosa con Marlene Mattos

La reina de los bajitos indicó que siempre fue ella quien tomó la iniciativa con los hombres. “Le coqueteé [a Junno] porque nadie se acerca a mí, así que no tuve más remedio que hacerlo. Algunos tipos con los que coqueteé me dijeron que no iba a funcionar, que no podían hacerlo conmigo y me agradecieron por pensar en ellos”, indicó. Y en ese momento, volvió a referirse a la persistencia de Mattos en su rol de espantar a sus potenciales conquistas. “Marlene no dejaba que nadie se acercara a mí. Fue dominando mi vida. No sucedió de la noche a la mañana. No creo que ni ella supiera hasta dónde podía llegar, y lo dejé pasar, creyendo que era lo mejor para mí”.

Xuxa se refirió a su tormentosa relación con su exmanager, Marlene Mattos
Xuxa se refirió a su tormentosa relación con su exmanager, Marlene Mattos

“Llegó un punto en el que me decía ‘¡No te sientes así!’, ‘¡No hables así!’ ‘Ponete esta ropa’, “No camines de esa manera’, ‘No comas así’, ‘No quiero que hables con esa persona’. Sé que parece que le estoy echando toda la culpa a ella, pero la verdad es que no me obligaba a nada: yo la dejaba hacer. Entonces, empezó a ser una obligación obedecerla. Yo pensaba que sin ella no podía seguir andando. Ella escribía cosas y yo tenía de decir lo que ella había escrito. En las entrevistas yo respondía y ella cambiaba lo que yo había dicho por lo que ella quería”, ejemplificó.

Esa relación con su histórica manager despertó en su momento un mar de especulaciones. Y Xuxa lo sabe. “Todo el mundo piensa que tenía relaciones sexuales con ella. Realmente dejé mi vida en sus manos porque creía en ella. Creo que se preocupaba mucho por mí porque yo era su trabajo. Yo quería que me quisiera, que me protegiera, y ella quería cuidar su trabajo”, aseguró. Fue su madre quien le señaló por primera vez la extraña posición que había llegado a ocupar en su vida. “Me fui de casa por eso”, recordó la conductora.

Xuxa junto a su hija Sasha
Xuxa junto a su hija SashaHOLA

Recién tomó consciencia de lo que ocurría cuando nació Sasha: “No quise que mi hija escuchara que me trataba así y se avergonzara de tener una madre que no podía decidir cómo caminar, hablar o vestir. Empecé a ver fuera de esa burbuja. Con el tiempo, descubrí que Marlene manipulaba mis teléfonos para saber a quién llamaba y cuánto tiempo me quedaba charlando. Era realmente una prisión. En los hoteles en los que me hospedaba, me encerraba y me quitaba la llave de la puerta”, detalló.

La presentadora también se pronunció sobre los comentarios negativos que ha recibido en las redes por su apariencia en los últimos años. “Hace cinco meses pensaba que me veía hecha un desastre. ‘Voy a cumplir 60 años, no me gustan mis piernas, mi panza, mi pecho, mi cara…’. Tengo un espejo en casa, me veo y trabajo con mi imagen desde los 16 años, antes de que me digan que soy vieja, sé cuántos años tengo, sé que mis células ya no se regeneran, que ya no tengo colágeno, que mi cuerpo no es ya es lo mismo. Es muy peyorativo escuchar ‘esa vieja’. Ya estoy vieja, ya me siento vieja, y me puse a hacer un poquito de láser, para volver a hacer pilates”, indicó. Y recordó que la primera persona que le dijo que estaba vieja fue Mattos: “Tenía 37 años y me decía que era muy vieja para trabajar. Fue muy cruel haber trabajado con mi imagen desde los 16 años y tener que escuchar esas locuras”.

Fuente: La Nación