En la demanda presentada en una corte federal de Los Ángeles, Guns N’ Roses acusó a Oskar Blues de aprovecharse de forma intencionada de su buena voluntad, prestigio y fama al vender «Guns ‘N’ Rosé» desde principios de 2018 y engañar a los consumidores haciéndoles creer que la banda está conectada con la cerveza.